El país no tiene recursos para garantizar una correcta educación. Por ello, las marcas deciden encargarse de gestionar espacios en los que desarrollar su propio sistema, un aprendizaje alternativo que ofrece a los jóvenes actividades lucrativas y formativas basadas en sus intereses, pero que conlleva concesiones como ser vigilados permanentemente para estudiar el mercado y las tendencias. Ari descubre que hay un grupo, Sin Identidad, que intenta despertar conciencias en el juego. Una reflexión sobre las relaciones sociales entre adolescentes del siglo XXI
El país no tiene recursos para garantizar una correcta educación. Por ello, las marcas deciden encargarse de gestionar espacios en los que desarrollar su propio sistema, un aprendizaje alternativo que ofrece a los jóvenes actividades lucrativas y formativas basadas en sus intereses, pero que conlleva concesiones como ser vigilados permanentemente para estudiar el mercado y las tendencias. Ari descubre que hay un grupo, Sin Identidad, que intenta despertar conciencias en el juego. Una reflexión sobre las relaciones sociales entre... Seguir leyendo
Sin identidad
Si se grabara un reality en mi instituto, las cámaras apuntarían directamente a la Explanada. Allí es donde se cuece todo. En realidad, es probable que ya nos graben. Al fin y al cabo hay cámaras de seguridad de cuando el edificio era un centro comercial, antes de que los transformaran en uno de los institutos del Juego. Todo el mundo sabe que nos observan, no hay por qué ponerse paranoico: es así y punto.