David Lozano, poseedor de una larga y fructífera carrera en el ámbito de la literatura juvenil, ha vuelto a obtener el premio Gran Angular con una novela en la que hace gala de mantener intactas las virtudes de aquella narrativa "marca de la casa" con la que sedujo a los adolescentes más de diez años atrás. Misterio, hechos cruentos con difícil explicación abordados desde una investigación llevada a cabo por los propios jóvenes, y esbozos de una realidad social a la que no debemos permanecer indiferentes. Estos son algunos de los componentes de ese cóctel mágico con el que el autor zaragozano, que visitó en varias ocasiones el club de lectura juvenil de la Fundación Germán Sánchez Ruipérez irradiando cariño y carisma, y protagonizando un inolvidable "tercer tiempo" -fuera del horario y espacio oficial-; para charlar de literatura frente a un café con los chicos y chicas. En aquellas conversaciones David ya dejaba entrever su interés por incentivar el coloquio enfrentando puntos de vista, premisas que sirven aquí como motor del argumento. El protagonista habla con un fallecido, un joven como él, que ha perdido la vida en extrañas circunstancias y al que ha descubierto a través de imágenes en Instagram. Motivado por la curiosidad, investiga sobre su vida y comienza a sentirse fascinado por esa figura, hasta el punto de que le hubiera gustado formar parte de su círculo de afectos, siendo este tan diferente al que ahora posee. El narrador está interno en un centro de reforma para menores infractores, espacio en el que, en un giro macabro del destino, se ve obligado a recibir al presunto asesino. Esta situación genera un enorme conflicto personal: ¿acatar con ética los protocolos o mostrar rechazo frontal a su presencia basándose en suposiciones? El jurado, en su nota de prensa, destacó “la originalidad del enfoque, la calidad literaria y la agilidad narrativa. Por presentar un escenario complejo y transformador, con una voz protagonista que conecta con el lector potencial, construyendo un mundo de ficción que interpela a los adolescentes de tú a tú, sin condescendencia. Su lectura no te deja indiferente; revuelve y te arrastra a posicionarte y compartir puntos de vista. Suscita reflexión y debate. Crea un mundo de ficción del que no sales indemne”.
David Lozano, poseedor de una larga y fructífera carrera en el ámbito de la literatura juvenil, ha vuelto a obtener el premio Gran Angular con una novela en la que hace gala de mantener intactas las virtudes de aquella narrativa "marca de la casa" con la que sedujo a los adolescentes más de diez años atrás. Misterio, hechos cruentos con difícil explicación abordados desde una investigación llevada a cabo por los propios... Seguir leyendo
INTRUSO
Día 1
Ya estabas muerto, aunque no lo sabías.
Apuraste tus últimas horas mientras te hacías un selfi en ese ascensor. De haber sospechado que iban a asesinarte, habrías cambiado tus planes de aquella tarde.