El libro contiene veinte poemas de Laura Devetach ilustrados por Istvansch. Las ilustraciones combinan la técnica del collage con el estilo propio del arte pop para fragmentar paisajes urbanos y mediterráneos mediante la mezcla de fotos y figuras geométricas. El libro se presenta dividido por un troquel que permite la separación de sus hojas para luego confeccionar aviones de papel. Contiene sencillas instrucciones para elaborar distintos modelos. Todos los poemas están repetidos, de modo que tras separar las hojas troqueladas queda una copia de los textos en el libro. El libro contiene veinte poemas de Laura Devetach ilustrados por Istvansch. Las ilustraciones combinan la técnica del collage con el estilo propio del arte pop para fragmentar paisajes urbanos y mediterráneos mediante la mezcla de fotos y figuras geométricas. El libro se presenta dividido por un troquel que permite la separación de sus hojas para luego confeccionar aviones de papel. Contiene sencillas instrucciones para elaborar distintos modelos. Todos los poemas están repetidos, de modo que tras separar las hojas troqueladas queda una copia de los textos en el libro.

Avión que va, avión que llega

Nadie podía pararlos.
Los avioncitos volaban en la Escuela Normal, aunque la directora los había prohibido en las aulas.
Se escapaban luego a la plaza, a las esquinas.
A mí no me llegaba ninguno porque iba al colegio de monjas y eso me alejaba de los hilos que todos tejían con los aviones.