Marta y la bicicleta, del escritor y poeta suizo Germano Zullo, en una versión ilustrada por Albertine; y Soy un caballo, del escritor francés Bernard Friot, con dibujos de Gek Tessaro, son los primeros títulos que la editorial ha incluido en su nueva colección Siruela Ilustrada.

Con ellos este sello amplía las propuestas de su catálogo infantil para dirigirse también a los primeros lectores (a partir de cuatro años). El objetivo es seleccionar una colección repleta de álbumes ilustrados con entrañables y divertidas historias que, al mismo tiempo, ayuden a los más pequeños de la casa a conocerse a sí mismos y a descubrir el mundo que les rodea.

Cada uno de los textos viene acompañado de una ficha de apoyo, orientada a educadores, padres y profesionales del mundo del libro, que refuerzan la educación en valores e invita a realizar la lectura en compañía.

Ana Laura Álvarez, editora de LIJ, contesta a nuestras preguntas en torno a esta nueva iniciativa:

Siruela ha ampliado el catálogo a nuevas franjas de edad ¿Cuándo surge esta posibilidad? ¿Cuál ha sido el motivo?

En Siruela habíamos publicado ya algunos libros ilustrados para niños más pequeños, pero llevamos tiempo trabajando en un proyecto nuevo: una colección de álbumes ilustrados con historias y propuestas gráficas muy frescas, divertidas y entrañables. Siruela Ilustrada ha arrancado con: Marta y la bicicleta de Germano Zullo y Albertine, y Soy un caballo de Bernard Friot y Gek Tessaro. Somos conscientes de que en el mercado español e hispanoamericano existen muchas opciones de libros ilustrados de gran calidad, y queremos sumarnos a ese ámbito con nuestras propuestas.  

Aunque en vuestras colecciones siempre ha habido una presencia destacada de ilustradores inolvidables, ¿significa esta apuesta el inicio de un nuevo capítulo centrado especialmente en la imagen? 

Sí, Siruela Ilustrada abre un nuevo capítulo en nuestro catálogo, en el que la imagen y las historias dialogan y comparten protagonismo. Estamos participando en esta línea con gran ilusión y propuestas interesantes que entusiasmen a nuestros lectores de todas las edades, tanto niños como aficionados a este tipo de libros. Nuestra idea es publicar al menos una media de seis álbumes ilustrados por año.

En relación con el arte gráfico, muchas editoriales están abriendo sellos específicos para publicar cómics, ¿habéis sentido alguna vez la tentación de introducir este formato en vuestro catálogo?

Si bien hemos publicado algunos comics de forma excepcional (El limpiagafas cuántico, de Fernanda Krahn-Uribe), publicar este tipo de libros en nuestro catálogo no es una opción que contemplemos. Creo que los álbumes ilustrados son un género más cercano a nuestra línea editorial infantil y juvenil, y por ello lo hemos incluido de una forma más natural. Estamos poniendo todo nuestro empeño e ilusión en que Siruela Ilustrada aporte disfrute y reflexión a sus lectores, y en ello estamos centrados ahora mismo.

La apuesta arranca con joyas firmadas por dos autores muy conocidos por el público (Germano Zullo y Bernard Friot, este último no tanto en España, pero sí en Francia). Ambos destacan por su humor, ¿por qué elegisteis a estos escritores para empezar?

El hecho de que los autores sean conocidos es para nosotros menos importante que el interés que nos despierta su trabajo o la forma en la que nos han cautivado y entusiasmado estas obras en particular. Entre los álbumes ilustrados existen historias fascinantes, y hay formas tan innumerables como únicas de reflexionar a través de ellas sobre el mundo que nos rodea, sobre las relaciones que establecemos con nuestro entorno y con otras personas, sobre la forma en que reaccionamos y decidimos vivir las experiencias del día a día, y que bien pueden ser simples anécdotas o auténticas lecciones de vida (me refiero a un sentido existencial más que moral). En estos dos libros, igual que en la vida real, lo banal puede transformarse en trascendente y la identidad propia es el resultado de un proceso de auto-construcción (en constante transformación, por cierto), y de elección. En cuanto al sentido del humor, es indispensable para entender el mundo de una forma más amable y menos rígida; la risa es un recurso que nos libera incluso en las situaciones más dramáticas.

¿Podéis desvelar o dar alguna pista sobre los nuevos títulos que estáis preparando?

Preferimos dejar que los lectores de nuestros dos primeros libros de Siruela Ilustrada los busquen cuando salgan, en primavera de 2017. Como pista, diré que sus protagonistas son tan divertidos como peculiares… así que podrían perfectamente hacer pandilla con la vaca Marta y el Caballo-Camello de los dos títulos que ya hemos publicado.

¿Cómo ha sido el proceso de edición de los dos libros? ¿Ha existido alguna dificultad?

El oficio editorial es un aprendizaje constante y esta nueva aventura implica retos, pero también grandes satisfacciones. El proceso de edición de estos dos libros ha tenido algunas dificultades, claro; el mundo de los álbumes ilustrados es diferente en varios aspectos al proceso editorial de los libros que hemos publicado hasta ahora. Hay infinidad de detalles nuevos a los que poner atención, pero con nuestra experiencia y gracias al trabajo en equipo con nuestros colaboradores, lo estamos disfrutando mucho.

¿En qué consisten exactamente los materiales de apoyo que se ofrecen junto a las dos historias?

Los materiales que acompañan las historias, y que se podrán descargar de nuestra web, ofrecen distintas lecturas y perspectivas de las historias y de los personajes. El contenido incluye actividades e invita a cada lector a compartir los detalles y curiosidades que descubre o interpreta en su particular recorrido por los libros y a vincularlos con su propia historia. 

La editorial madrileña, fundada a comienzos de los años 80 por Jacobo Siruela, siempre se ha caracterizado por la gran calidad de las historias que alberga su catálogo, firmadas por los más prestigiosos autores nacionales e internacionales.

Sus publicaciones se dividen en dos sellos, Siruela y Alevosía. El primero engloba libros de narrativa contemporánea española y extranjera, clásicos, ensayo filosófico, ensayo literario o artístico, no ficción, novela policiaca y literatura infantil y juvenil, tanto en papel como en digital. El segundo busca nuevos perfiles lectores con títulos crossover, novela histórica, memoria y testimonio, thriller contemporáneo…

Centrándonos en su exquisita apuesta por la Literatura Infantil y Juvenil, desde 1990 lleva en activo la famosa colección Las Tres Edades, dirigida a un público de entre 8 y 88 años. Es, posiblemente, la más popular de Siruela, con éxitos tan extendidos como Caperucita en Manhattan de Carmen Martín Gaite, El mundo de Sofía de Jostein Gaarder, El diablo de los números de Hans Magnus Enzensberger, El viaje de Teo de Catherine Clément o No soy un libro de José María Merino.

Gracias a Michi Strausfeld, editora responsable de esta colección, aterrizaron en España títulos que nunca antes habían sido traducidos, y la editorial apostó por escritores que luego se convertirían en fenómenos mundiales. Con Las Tres Edades han roto clichés literarios ofreciendo una literatura para todo tipo de lectores, dinamitando la tradicional clasificación por edad tan vincula a la LIJ, y aportando un soplo de aire fresco que aún permanece activo (recientemente se celebró su 25 aniversario). Por su parte, Strausfeld fue condecorada con la Orden de Alfonso X El Sabio en 2015.