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¿Creías que lo habías visto todo? La bicilibro triunfa en varias ciudades

Bibliobuses, burros que llevan libros hasta los rincones más inhóspitos de la geografía, furgonetas con propuestas lectoras, cabinas telefónicas reconvertidas en almacenes de buenas historias... Conocemos un buen puñado de originales y prácticas ideas en relación a los servicios que se ofrecen para los lectores independientemente del lugar del mundo en el que residan.

En Dallas (EEUU) dan un paso más y apuestan por la bicicleta como vehículo ideal para acercar la lectura a todos los rincones. La Biblioteca Pública de la ciudad norteamericana ha firmado un acuerdo con la empresa de bicicletas Deep Ellum para servir sugerencias lectoras por toda la urbe sirviéndose de sus vehículos.

El objetivo es aportar una novedosa y original forma de extender el servicio a todos los rincones de esta gran capital (el último censo habla de un núcleo urbano en el que residen más de 1.200.000 habitantes). Las bicicletas llevan incorporado un remolque en el que se transportan los ejemplares. Estos son previamente seleccionados por los bibliotecarios en función del público y de la demanda existente en la zona a la que se desplazan (escuelas de Educación Primaria, Infantil, residencias de ancianos…)

Los trabajadores que participan en el proyecto disponen de red wifi móvil para facilitar el proceso de préstamo informatizado desde la bicicleta, así como la expedición de nuevos carnets para quienes lo deseen.

La idea nació de Mark Draz, bibliotecario y ciclista, que adoptó la propuesta a partir de experiencias similares llevadas a cabo en Los Ángeles y Boston. Esta nueva forma de comunicación con los usuarios es posible gracias a las alianzas firmadas también con Street Smart, una compañía de remolques. El proyecto ha sido financiado mediante una campaña de crowdfunding, algunos donativos privados y la ayuda inestimable de Bike Friendly Oak Cliff, una organización sin ánimo de lucro que promueve el uso de las bicicletas como medio de transporte urbano.

Los creadores de esta iniciativa resumen el proyecto, que tiene visos de continuar extendiéndose durante la primavera, con una particular filosofía: libros y bicicletas comparten los mismos conceptos: autosuficiencia y libertad personal.

Fuente: Al Día Dallas
Imagen: Bibliobicicleta.com

 
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