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¡VIOLENCIA, JAMÁS!
  Astrid Lindgren

En el momento de recoger el Premio de la Paz de los Libreros Alemanes de 1978, la emblemática autora pronunció un discurso que vino a refrendar la postura de la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño, el más ratificado de la historia, y que enlaza al cien por cien con los ODS fijados para el 2030. La eliminación de toda forma de violencia infantil ahora puede parecer incuestionable, pero en el momento de enunciar estas palabras, ahora recogidas por Kókinos en una excelente versión, existían aún criterios divergentes e incluso una amplia mayoría de las familias admitía utilizar el castigo corporal como medida educativa cotidiana. Hoy día son muchos los que todavía crecen sometidos a disciplinas férreas que incluyen métodos violentos o coacciones que generan miedo en algunos rincones del mundo, asunto que va claramente contra el derecho infantil y que influye negativamente en el crecimiento de los menores. Las palabras de Lindgren, prologadas por la Representante Especial del Secretariado General de la ONU sobre la Violencia contra los Niños, resuenan con más fuerza que nunca ("en estos momentos el mundo entero vive atemorizado por una guerra"); y derriban los mismos estereotipos que tuvieron que derruir en aquella histórica charla, que terminó por cambiar la opinión de los asistentes y que, el paso de los años, ha convertido en un texto de referencia, citado por numerosos escritores contemporáneos -como Meg Rosoff-; como "libro de cabecera". El amor, la comprensión y el diálogo siempre brillarán con más fuerza que los golpes y actos que tratan de apuntalar conceptos o aprendizajes a través de acciones severas dolorosas e impetuosas.

Camino de mi casa
  Ana Tortosa

Pasan los años y nunca se desactualizará, lamentablemente, esta cruda denuncia de la guerra que surge de la intensa añoranza de lo perdido por su destrucción. La narradora recuerda los rincones de su infancia, las gentes que poblaron en otro tiempo un universo feliz; de todo eso ya no queda nada, si bien la esperanza es lo último que se pierde, aunque se imponga la sinrazón bélica. Un álbum sobrecogedor por el arte gráfico, diseñado a base de ilustraciones de estética pictórica, sugerentes y evocadoras, realizadas por Esperanza León quién, de hecho, posee una amplia trayectoría como pintora.

Tengo un tanque de juguete
  Pere Martí i Bertran

Como en una película, el lector accede a la historia a través de un travelling inverso que va mostrando la evolución del mundo del juguete a lo largo del tiempo.  Del mando de la videoconsola a las figuras de plástico y plomo, pasando por la peonza o las fichas de dominó. Construidas con lápices de colores, las ilustraciones acompañan los versos de Martí i Bertrán, publicados originalmente en catalán en la antología Paraules bessones (2010), un texto que muestra la transformación del protagonista al descubrir, a través de la televisión, que todos esos soldados con los que tanto jugó, en realidad, son una siniestra representación de las guerras que asolan al mundo. Decidido a no recrearse en ese macabro contexto, decide reconvertir al batallón en un ejército de campesinos que cultivan sus huertos y cuidan los animales. Una bella reflexión pacifista que destaca por el proyecto gráfico, compuesto por imágenes brumosas y bocetos en grafito. Como señalan los autores en la parte final de la obra, “si pusiéramos estas secuenciadas formarían un mural de unos ocho metros de largo”, como puede observarse en la representación que se hace en las guardas. Incluye un epílogo en el que se habla del sentido del poema, el trabajo realizado por la ilustradora, algunas curiosidades y reflexiones al hilo del Día Escolar de la No Violencia y la Paz, así como una propuesta didáctica para realizar a través de manualidades.

 

El enemigo
 Davide Cali

¿Hay mayor sinsentido que la guerra? Ese es el mensaje veraz que trasciende a la exquisita historia que plantean el escritor y dibujante suizo, afincado en Italia, Davide Cali y el autor de cómic e ilustrador francés Serge Bloch, una pareja de altura que fusiona su talento a base de textos cortos, profundamente críticos y reflexivos, que apuntalan la colección de imágenes, directamente emparentadas con el mundo del cómic, para narrar el absurdo de la lucha armada. En un clima de soledad, aridez y desconsuelo, capturado mediante el uso de tonalidades frías, dos soldados desde sus respectivas trincheras piensan, a pesar de sus teóricas diferencias, exactamente lo mismo: sienten hambre, viven en soledad, asisten a mentiras en las que ellos nunca habrían participado y echan profundamente de menos a su familia, aspecto retratado a través de la inclusión de algunas fotografías en blanco y negro, como parte de un collage que complementa las ilustraciones en algunos pasajes. El enemigo, el culpable de todo ello, resulta ser siempre el otro pero los lectores tienen el poder de empezar a cambiar la historia… La obra acumula una larga hilera de premios desde que fue publicada, por primera vez, en 2007. La presente versión cuenta con una nueva traducción.

 

El nacimiento del DRAGÓN
 Marie Sellier

Seleccionado por el Ministerio de Educación Argentina para su plan de lectura en el año 2014, Kalandraka reedita este bello álbum, tanto por su contenido como por su continente, en el que se narra la historia que explica el origen del dragón en la cultura china. Los niños, cansados de las guerras, decidieron unir las partes de los animales que los protegían y de ahí salió un nuevo animal al que llamaron dragón, con cuerpo de serpiente, escamas de pez, cabeza de caballo, cuernos de búfalo y patas de ave. El texto, en castellano y en chino, está acompañado por delicadas ilustraciones entre las que se deslizan caligrafías acuñadas por Wang Fei. Aunque se orienta para niños/as de 6 a 8 años, se trata de una obra ideal para todas las edades, que incluye un juego de memoria al final para practicar en compañía.

La conferencia de los animales
 Erich Kästner

Ya que los políticos son incapaces de encontrar el medio para detener un conflicto bélico, es momento de que los niños y los animales encuentren el camino de la paz. En esta célebre sátira contra los desmanes de la guerra, un alegato en el que se ensalzan muchos valores actualmente en crisis, ambos colectivos se unen, gracias a la convocatoria del elefante, para dar a los adultos una valiosa lección de responsabilidad y esperanza. El autor, que sufrió la represión nazi en primera persona, muestra su compromiso aquí, como en toda su obra, con los que luchan contra las injusticias, sin olvidar el humor a pesar de la dureza de las reflexiones. Una fábula considerada obra fundamental de la LIJ recuperada, con nueva propuesta gráfica, por Loqueleo que reivindica el legado del escritor alemán, distinguido con el Premio Andersen en el año 1960.

 

155. Simón Radowitzky
  Agustín Comotto
A veces aparecen extrañas sinfonías gráficas que ensalzan aún más las poderosas virtudes que encierran los códigos inherentes al mundo del cómic. El trabajo de Comotto, desarrollado a lo largo de casi una década, cristaliza con una colección de dolorosas y tortuosas estampas, todo un espectáculo gráfico, que pueden despertar la curiosidad histórica del joven aficionado al tebeo a ambos lados del océano.
La vida del anarquista y pacifista, aunque suene a términos antagónicos, Simón Radowitzky, recluido y torturado durante veintidós años por luchar contra la represión argentina, es una travesía por algunos de los capítulos más importantes de la historia mundial del siglo XX, como la revolución rusa o la guerra civil española. Un hombre fiel a sus ideales con el que el lector empatiza independientemente de las ideologías, retratado y homenajeado en pasajes oscuros, esbozados con todo lujo de detalles, y en donde el color rojo sirve como magnético hilo conductor, entre la oscuridad del blanco y negro, de la sufrida existencia del protagonista.
La zapatilla roja
 Karin Grub

Desde la mirada de un periodista vemos las consecuencias de la guerra. Acaban de bombardear un autobús escolar en el que unos niños se dirigían a jugar un partido de baloncesto. El periodista debe seguir la noticia, pero un niño gravemente herido que lleva en un pie una zapatilla roja de baloncesto, idéntica a las que él regaló a su sobrino, le devolverá a la cruda realidad del momento y a las diferentes vidas que tienen los niños en diversas partes del mundo. Las ilustraciones en blanco y negro, excepto la zapatilla roja, nos muestran un panorama triste y desolador. Una lectura que invita a la reflexión, que no dejará a nadie indiferente, una historia que nos muestra hechos que, por desgracia, son reales y siguen sucediendo.

La partida del soldado
  Javier de Isusi

Acuarelas de tintes sombríos ilustran acertadamente en este álbum intimista el conflicto y el dilema de la gente corriente ante la guerra. Después de que un hombre ha tomado la decisión de convertirse en soldado, su mujer le hace ver las cosas de otro modo. Entre las muchas formas de hacer un alegato pacifista, esta, focalizada en dos seres humanos anónimos de cualquier lugar del mundo que ante la fractura del conflicto bélico contraponen sus puntos de vista, es sin duda una de las más eficaces. Un álbum para lectores que ya han madurado, de cualquier edad.

Sólo tú puedes salvar a la humanidad. Una aventura de Johnny Maxwell
  Terry Pratchett

En ocasiones las guerras se producen por la terquedad de los implicados a la hora de decidir no luchar. Eso no le ha ocurrido a Johnny. Antes de llegar al nivel diez de Solo tú puedes salvar a la humanidad, la tropa de alienígenas contra los que lucha se ha rendido y lo ha elegido como guía hacia su Frontera. Con esta divertida obra el añorado autor británico de novelas de ciencia ficción hace reflexionar a los jóvenes sobre la necesidad de tomar decisiones y enfrentarse a lo establecido. Con su discurso antibelicista arranca sonrisas a los lectores e incita a reflexionar sobre lo absurdas que son las guerras detallando las escasas diferencias que suelen separar a los "enemigos"

Munro
 Jules Feiffer

Munro es un niño de cuatro años que un día recibe una carta para su reclutamiento por el ejército. Se presenta y sorprendentemente pasa todas las pruebas que le realizan, tanto físicas como psicológicas. Cuando Munro intenta hacerse oír, nadie se da cuenta que es solamente un niño, hasta el punto de que le hacen dudar al propio protagonista de su condición de niño. ¿Cómo es posible estar tan ciego y no ver lo que es tan evidente? El autor, conocido por sus sátiras políticas en prensa, presenta una obra crítica y mordaz con el ejército. Una obra en la que nos damos cuenta lo fácil que es negar lo evidente cuando no se quiere ver la realidad.

 
 
 
 
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