Te regalo un cuento
Podía haber sido un paseo por el parque, una canción a medio hacer o un truco de magia sin ensayar apenas.
Pero no podía ser de otro modo, quería que fuera un cuento. Un cuento para que puedas hacerlo tuyo dibujándole una narizota. Para que lo compartas con tu vecina de escalera o con tu gato.
Te regalo un cuento para que puedas llevarlo contigo, dobladito en el bolsillo o entre las páginas de un libro de aventuras de piratas.
Para que lo entregues a quien más te apetezca.