Un ejemplo cercano al mundo del pequeño lector en el que se nos cuenta cómo la amistad entre iguales se condimenta muchas veces con ingredientes de egoísmo y generosidad. El acertado ritmo del texto y unas ilustraciones que describen el desarrollo de la trama sirven al lector para identificarse con el problema que separa a los amigos Oso y Conejo y encontrar el camino para superarlo.Un ejemplo cercano al mundo del pequeño lector en el que se nos cuenta cómo la amistad entre iguales se condimenta muchas veces con ingredientes de egoísmo y generosidad. El acertado ritmo del texto y unas ilustraciones que describen el desarrollo de la trama sirven al lector para identificarse con el problema que separa a los amigos Oso y Conejo y encontrar el camino para superarlo.
¿Me perdonas?
Oso y Conejo eran los mejores amigos del mundo. Vivían juntos en la casa Oso-Conejo, una casa preciosa. Hacían sus comidas Oso-Conejo en su cocina Oso-Conejo. La especialidad de Conejo eran los champiñones. Y a Oso se le daban fenomenal los bizcochos de miel. Por la noche, dormían en su litera Oso-Conejo. Conejo dormía abajo y Oso arriba, porque era un experto en escalada.