Este volumen del jueguero recoge cuarenta juegos de calle para los que no se necesita comprar nada. Son juegos clásicos que solo precisan objetos comunes y un lugar más o menos espacioso donde saltar, correr o cantar. Son los juegos de toda la vida, con interesantes variantes mexicanas, que favorecen la sociabilidad y la comunicación entre niños y adultos. Aprende las reglas de juegos tan sencillos como el «piedra, papel o tijera», las carreras de sacos, los juegos de comba, de goma elástica, la «gallinita ciega» o el «burro».
Este volumen del jueguero recoge cuarenta juegos de calle para los que no se necesita comprar nada. Son juegos clásicos que solo precisan objetos comunes y un lugar más o menos espacioso donde saltar, correr o cantar. Son los juegos de toda la vida, con interesantes variantes mexicanas, que favorecen la sociabilidad y la comunicación entre niños y adultos. Aprende las reglas de juegos tan sencillos como el «piedra, papel o tijera», las carreras de sacos, los juegos de comba, de goma elástica, la «gallinita ciega» o el... Seguir leyendo
Jueguero.
Cuando hablamos de «juegos» o «jugar», pensamos en niños; pero tanto ellos como los adultos, jugamos. Mientras los niños juegan a las «escondidillas», a «la comidita» o a «las muñecas», los adultos lo hacemos al ajedrez o al póquer, o practicamos algún deporte, y no es raro ver a un señor entusiasmado tratando de romper una piñata.
¿Hasta qué grado los inventores, descubridores, creadores artísticos, juegan cuando crean?
Nuestra personalidad adulta abriga un aspecto infantil...