Historia muy divertida de una niña que quiere hacerse mayor. Las preguntas que hace a los adultos son respondidas por éstos con las habituales incoherencias, lo cual implica una seria reflexión sobre el mundo de los mayores y el trato que dan a los niños. Las ilustraciones, muy expresivas, están repletas de sugerencias humorísticas.
Historia muy divertida de una niña que quiere hacerse mayor. Las preguntas que hace a los adultos son respondidas por éstos con las habituales incoherencias, lo cual implica una seria reflexión sobre el mundo de los mayores y el trato que dan a los niños. Las ilustraciones, muy expresivas, están repletas de sugerencias humorísticas.
Yo quiero ser
«¡Vaya, cuánto he crecido! ¡Me estoy haciendo mayor!», pensó la princesa.
«Me pregunto cómo tengo que ser. A lo mejor, ahora tengo que cambiar».
«Pero ¿de qué manera tengo que cambiar?»
«Desde luego, así no. Voy a preguntar a mamá».