Con esa maestría y frescura que caracteriza a Janosch, tenemos en este libro una nueva entrega de las tiernas y entrañables aventuras del pequeño Oso y el pequeño Tigre. En esta ocasión Tigre le pedirá a Oso que le escriba desde el río, porque se siente muy solo y triste cuando su amigo se va. Los personajes expresan sus necesidades emocionales desde la calma y la asertividad, mostrando a los niños y niñas la importancia de comunicar lo que se siente y de intentar buscar soluciones cuando estamos insatisfechos.
Con esa maestría y frescura que caracteriza a Janosch, tenemos en este libro una nueva entrega de las tiernas y entrañables aventuras del pequeño Oso y el pequeño Tigre. En esta ocasión Tigre le pedirá a Oso que le escriba desde el río, porque se siente muy solo y triste cuando su amigo se va. Los personajes expresan sus necesidades emocionales desde la calma y la asertividad, mostrando a los niños y niñas la importancia de comunicar lo que se siente y de intentar buscar soluciones cuando estamos insatisfechos.
Correo para el Tigre
Un día, cuando el pequeño oso se iba otra vez de pesca al río, el pequeño tigre dijo:
–Siempre que no estás me siento muy solo. ¡Escríbeme una carta desde allí para que me anime, anda!
–Vale –dijo el pequeño oso, y se llevó un frasquito de tinta azul y una pluma de canario, porque con esas cosas se escribe muy bien. Y también papel de carta y un sobre para meterlo.
Allá abajo, en el río, primero enganchó una lombriz en el anzuelo y después lanzó la caña al agua...