A veces los adultos se vuelven locos, hasta tal punto de regalar a un hijo por su cumpleaños una boa, pero aún más disparatada es esta historia narrada por Randy Siegel, donde una divertida e inteligente serpiente se convierte en la mascota de una familia, un animal totalmente doméstico, capaz de escribir contorsionando todo su cuerpo, cocinar, ayudar en las tareas de la casa, sacar al perro, ayudar en los deberes, responder todo tipo de preguntas y todo esto sin hacer daño a nadie.
El ilustrador Serge Bloch, con los maravillosos trazos de sus dibujos apaisados y sólo con tres colores, hace aún más divertida e ingeniosa esta historia tan peculiar.
A veces los adultos se vuelven locos, hasta tal punto de regalar a un hijo por su cumpleaños una boa, pero aún más disparatada es esta historia narrada por Randy Siegel, donde una divertida e inteligente serpiente se convierte en la mascota de una familia, un animal totalmente doméstico, capaz de escribir contorsionando todo su cuerpo, cocinar, ayudar en las tareas de la casa, sacar al perro, ayudar en los deberes, responder todo tipo de preguntas y todo esto sin hacer daño a nadie.
El ilustrador Serge Bloch, con los maravillosos trazos de sus dibujos apaisados y sólo con tres... Seguir leyendo
Mi boa Bob
Estaba en mi habitación, haciendo ver que hacía mi tarea, cuando mi padre llamó a la puerta y entró. Traía una caja grande con un lazo rojo. Gritó:
- ¡Feliz cumpleaños, hijo! ¡Date prisa, ábrelo! ¡Venga, que necesita respirar! Eso me dio curiosidad. Así que arranqué el papel de regalo, abrí la caja y chillé: ¡Hala que guay!
En la caja había una jaula con una boa dentro. Era superlarga y de un color verde brillante.
- ¡Me has comprado una boa, no me lo puedo creer!
- Pues créetelo –dijo mi padre.