Como prueba para ser miembro de las Lechuzas, David golpea con una piedra a un compañero de la escuela que suele molestarlo. Ese hecho es el detonador que lo lleva a revisar sus actitudes, antes y después de pertenecer a la pandilla, Nada de lo que hacía antes le gusta desde que se une a ella: sus amistades ni sus pláticas con Sofía. En la padilla todos son alguien, sin embargo no deja de ser difícil crecer, sentirse solo y tomar decisiones. Una intensa novela sobre la presión social que sufren los adolescentes y el conflicto entre sus convicciones y la necesidad de pertenencia.
Como prueba para ser miembro de las Lechuzas, David golpea con una piedra a un compañero de la escuela que suele molestarlo. Ese hecho es el detonador que lo lleva a revisar sus actitudes, antes y después de pertenecer a la pandilla, Nada de lo que hacía antes le gusta desde que se une a ella: sus amistades ni sus pláticas con Sofía. En la padilla todos son alguien, sin embargo no deja de ser difícil crecer, sentirse solo y tomar decisiones. Una intensa novela sobre la presión social que sufren los adolescentes y el conflicto entre sus... Seguir leyendo
La guarida de las lechuzas
Estoy sentado a horcadas sobre el pecho de Luis y sostengo en la mano una piedra…Esperen… sí, es una piedra mediana rugosa, aunque una superficie lisa en un costado, una piedra irregular igual que todas las que hay en el mundo… Me pesa un poco. No sé de dónde la tomé, pero está en mi mano. Luis apenas cierra los ojos, son una línea borrosa, casi quebradiza, alcanzo a ver bajo ellos las grandes pupilas nerviosas. Un ojo lo tiene abierto, el otro de donde le voy a pegar, ya casi está cerrado, esperando el golpe.