Vuelven Ana y su pandilla adorable, como siempre sin pelos en la lengua, buscando el lado divertido de la vida en una colección de pequeñas historias cotidianas. El día a día está lleno de travesuras y aventuras de las que, a veces, es preciso coger vacaciones. Al menos eso piensa Bubú, que además tiene cada vez mayor afición por la pintura. La rana Froga presenta a los lectores su problemático jardín y todos juntos celebran un picnic con invitado sorpresa. En su visita a la feria descubren que no siempre los trenes del terror provocan miedo. La receta del éxito de la serie se basa en una combinación de personajes sencillos, de trazo infantil y esquemático, vivos colores y combinaciones de ilustraciones en gran formato con distintos órdenes en la disposición de las viñetas, (un fantástico acercamiento al lenguaje del cómic para los más pequeños), sin olvidar la excepcional traducción que ayuda a conservar la frescura y el humor de la obra original. Sin duda una de las colecciones francesas más divertidas, innovadoras y originales de la literatura infantil actual.
Vuelven Ana y su pandilla adorable, como siempre sin pelos en la lengua, buscando el lado divertido de la vida en una colección de pequeñas historias cotidianas. El día a día está lleno de travesuras y aventuras de las que, a veces, es preciso coger vacaciones. Al menos eso piensa Bubú, que además tiene cada vez mayor afición por la pintura. La rana Froga presenta a los... Seguir leyendo
Ana y Froga. Una pandilla desastrosa
- ¡Eh, chicos, venid! ¡Bubú ya ha vuelto de sus vacaciones!
- DING DONG
- Ah, sois vosotros...
- ¡Pues sí!
- Menudo entusiasmo.
- ¡Hombre! ¡Hola, Cristóbal!
- ¡Hola!
- ¡Perdonad si os molestamos... ¿eh?
- No pasa nada. Sentaos. Eeehm... ¿Queréis un vaso de agua?
- Pues no, yo preferiría un cóctel de la casa, como el de Cristóbal.
- Y yo un chocolate caliente.