Dagmar Geisler plantea con delicadeza y también humor las peleas y enfados que se producen en el seno de las familias. De una forma cercana al niño le hace ver que en todas hay conflictos o malentendidos. Los motivos pueden ser muy variados desde problemas en el trabajo, estrés o personales. El niño no deberá sentirse mal ni pensar en lo peor cuando ocurra una discusión. Lo importante es saber por qué ha surgido, hablar, escuchar y reconciliarse. Un libro que ayudará a mediadores y progenitores.
Dagmar Geisler plantea con delicadeza y también humor las peleas y enfados que se producen en el seno de las familias. De una forma cercana al niño le hace ver que en todas hay conflictos o malentendidos. Los motivos pueden ser muy variados desde problemas en el trabajo, estrés o personales. El niño no deberá sentirse mal ni pensar en lo peor cuando ocurra una discusión. Lo importante es saber por qué ha surgido, hablar, escuchar y reconciliarse. Un libro que ayudará a mediadores y progenitores.
A veces mis padres se enfadan
Es normal que los padres, aunque se quieran, a veces discutan.
Puede que sea por un simple malentendido, o por tener opiniones diferentes en los asuntos importantes o en las pequeñas cosas... Esto también nos pasa con los amigos algunas veces, ¿verdad?
Es bastante difícil que nunca haya discusiones. Pero los malentendidos se pueden aclarar, y los conflictos de intereses deben abordarse de una forma creativa.