El agua como fuente de inspiración para músicos es el tema de este interesante libro. Una obra, como dice la introducción, "para leer, escuchar y sentir el fluir de la música". Cada pieza musical se puede escuchar en un cedé que acompaña a la publicación y corresponde a los diferentes autores que han participado en el libro. En todas se incluye biografía, información sobre la pieza seleccionada y unos apuntes musicales. Muy acertados los comentarios para ambientar y explicar las diferentes épocas así como la incorporación de un glosario con los términos musicales utilizados para los lectores no iniciados. Una propuesta sencilla, próxima y placentera de veinte obras de músicos clásicos como Beethoven, Vivaldi, Liszt o Ravel; y otros contemporáneos como Britten, Crumb, Lavista...
El agua como fuente de inspiración para músicos es el tema de este interesante libro. Una obra, como dice la introducción, "para leer, escuchar y sentir el fluir de la música". Cada pieza musical se puede escuchar en un cedé que acompaña a la publicación y corresponde a los diferentes autores que han participado en el libro. En todas se incluye biografía, información sobre la pieza seleccionada y unos apuntes musicales. Muy acertados los comentarios para ambientar y explicar las diferentes épocas así... Seguir leyendo
Introducción a la música de concierto. El agua
El agua nos conduce a imaginar territorios tan vastos como los océanos, ríos, lagos, glaciares... o tan pequeños como una lágrima, una partícula de vapor o una gota de lluvia. También trae a nuestra mente el frío de un témpano y el calor del géiser, la paz de un lago helado o la turbulencia de una cascada: así de multiforme y omnipresente es el agua. Hielo y vapor... el agua es el movimiento cíclico que va del cielo a la tierra y de regreso en un incesante juego de transformaciones.
Desde la prehistoria, los hombres entendieron la importancia de este elemento para asegurar su supervivencia. Por eso buscaron establecerse a la orilla de ríos o lagos, o junto al mar. Desde entonces se ha comprendido que el agua representa la vida y, al mismo tiempo, una fuerza con formidable capacidad destructora.