Marcos Guardiola reinterpreta los textos que Karl Marx esbozó en su juventud, una devastadora crítica sobre el poder corruptor del dinero, que permiten atisbar el posterior ideario del que fuera impulsor del socialismo científico, el comunismo moderno y el materialismo histórico, elementos que confluyen en distinto grado en la corriente política y filosófica bautizada con su propio nombre, el marxismo. Han llegado al siglo XXI con la misma fuerza y pasión con la que el autor criticó el mundo en el que le tocó vivir, tal vez porque subyacen los mismos problemas en el actual. Las imágenes representan una sucesión de escenas oníricas, que por momentos recuerdan algunos paisajes de artistas como El Bosco o figuras inspiradas en deidades de la cultura india. La obra incluye una referencia a un pasaje bíblico, La Caída, y a la obra de teatro El timón de Atenas, de William Shakespeare. Un inquietante panegírico que invita a los jóvenes lectores a reflexionar, a la vez que disfrutan con las fascinantes ilustraciones editadas en formato acordeón.
Marcos Guardiola reinterpreta los textos que Karl Marx esbozó en su juventud, una devastadora crítica sobre el poder corruptor del dinero, que permiten atisbar el posterior ideario del que fuera impulsor del socialismo científico, el comunismo moderno y el materialismo histórico, elementos que confluyen en distinto grado en la corriente política y filosófica bautizada con su propio nombre, el marxismo. Han llegado al siglo XXI con la misma fuerza y pasión con la que el autor criticó el mundo en el que le tocó... Seguir leyendo
El dios Dinero
La propiedad privada nos hizo tan estúpidos y limitados que un objeto solo es nuestro cuando lo tenemos, cuando existe para nosotros como capital.
O cuando es efectivamente poseído, comido, bebido, vestido, habitado... Es decir, cuando es usado por nosotros.
En reemplazo de todos los sentidos físicos y mentales, ha surgido ahí la pura alienación de todos los sentidos: el sentido de la posesión.