Con algunas reminiscencias a las geniales greguerías de Gómez de la Serna, la autora construye un catálogo que puede disfrutarse como primer acercamiento al abecedario, pleno de originalidad, atribuyendo una serie de cualidades a cada letra y representando todos los caracteres bajo el habitual, y muy personal, filtro conceptual ya esbozado en otras propuestas. Colorista y simpático en las definiciones, la sucesión, desde las guardas hasta la Z, es atractiva para los lectores más pequeños de la casa, justo cuando empiezan a familiarizarse con el alfabeto mediante el que construirán sus expresiones paulatinamente, a medida que vayan adquiriendo la capacidad para organizar las palabras y comunicarse. Simbólicos paralelismos, metáforas y un lenguaje cercano y juguetón, convierten este abecé en un imprescindible recurso ilustrado para padres, madres y educadores, (y, tal vez lo más importante, en un sensacional juego visual que hará sonreir a los niños)
Con algunas reminiscencias a las geniales greguerías de Gómez de la Serna, la autora construye un catálogo que puede disfrutarse como primer acercamiento al abecedario, pleno de originalidad, atribuyendo una serie de cualidades a cada letra y representando todos los caracteres bajo el habitual, y muy personal, filtro conceptual ya esbozado en otras propuestas. Colorista y simpático en las definiciones, la sucesión, desde las guardas hasta la Z, es atractiva para los lectores más pequeños de la casa, justo cuando... Seguir leyendo
Abecedario escondido
Los astronautas van a la luna en una A.
La liebre abre su paragüas sobre la B.
Los Reyes Magos y la C siguen la estrella.