El mundo adolescente está cargado de sentimientos, percepciones y descubrimientos capturados en estos versos que alternan profundas confesiones con retales de vida cotidiana, frases de la cultura popular, referencias a iconos de ayer, hoy y siempre o ideas divertidas que luchan con metáforas sobre el dolor. Ficcionarios, inventarios emocionales y palabras para narrar el día a día de los jóvenes, recuerdos de series de televisión, fragmentos de cine, personajes populares, pasajes históricos… un reality show emocional que atrapa desde sus primeros compases y en el que el autor deja entrever todo un catálogo de símbolos y sensaciones para definir estados de ánimo, cronologías de una relación o batallas diarias contra la injusticia o la desazón, en las que se asoman desde Mazinger Z hasta Los Vigilantes de la Playa sin que la propuesta disminuya la intensidad con la que ha sido concebida. Los esbozos en tinta china, a dos colores, de María Herreros, destacan objetos, miradas, rasgos y escenas del universo común tan bien retratado en esta antología.
El mundo adolescente está cargado de sentimientos, percepciones y descubrimientos capturados en estos versos que alternan profundas confesiones con retales de vida cotidiana, frases de la cultura popular, referencias a iconos de ayer, hoy y siempre o ideas divertidas que luchan con metáforas sobre el dolor. Ficcionarios, inventarios emocionales y palabras para narrar el día a día de los jóvenes, recuerdos de series de televisión, fragmentos de cine, personajes populares, pasajes históricos… un reality show emocional que... Seguir leyendo
Mi vida es un poema
Para abrir este libro
hace falta la llave de la lluvia:
cógelo con las manos y no temas
si te mojas con agua o con palabras.
Hace falta la clave del enigma,
el código secreto, el número
que abre de par en par
-de dos en dos se hacen mejor las cosas-
la caja fuerte donde está el misterio.