A veces, cada cierto tiempo, surgen héroes y heroínas que trastocan las bases de la literatura juvenil, aportando una visión fresca y desenfadada de diversos aspectos cotidianos que afectan a los adolescentes de hoy. Evie simboliza ese mundo en constante transformación, y enarbola la bandera del cambio a través de una historia, narrada a base de capítulos frugales pero intensos –todos ellos iniciados a partir de una obertura de citas literarias atribuidas a escritores de ayer y de hoy-; que trata de incitar al lector a modificar las normas establecidas en el campo de la educación, y a alzar la voz ante las injusticias que muchos chicos y chicas viven a diario en el marco de la enseñanza reglada. En la trama asoman las inquietudes propias de la edad, las primeras dudas y conflictos, el amor, las amistades intensas… pero desde una óptica original y nada tradicional. La propia protagonista muestra un entorno familiar un tanto atípico y con una peculiar relación con su madre, una mujer que comulga con ciertos valores del movimiento hippie de los años setenta. La historia, trufada de humor y fina ironía, contiene numerosas referencias a películas y series muy conocidas para los jóvenes de hoy, y presenta las andanzas de una adolescente que en el último año antes de acceder a la universidad, decide matricularse en un centro escolar (tras estudiar toda su vida en casa) Esa experiencia, tantas veces vista en las películas y telefilmes, dista mucho de su concepción idealizada, y provoca su beligerancia activa para tratar de revertir la situación. El regreso a la LIJ de la celebrada autora de Mi teoría de todo
A veces, cada cierto tiempo, surgen héroes y heroínas que trastocan las bases de la literatura juvenil, aportando una visión fresca y desenfadada de diversos aspectos cotidianos que afectan a los adolescentes de hoy. Evie simboliza ese mundo en constante transformación, y enarbola la bandera del cambio a través de una historia, narrada a base de capítulos frugales pero intensos –todos ellos iniciados a partir de una obertura de citas literarias atribuidas a escritores de ayer y de hoy-; que trata de incitar al lector a modificar las normas... Seguir leyendo
Esta chica es diferente
Consigo agarrar la serpiente, pero se me retuerce el pie y me caigo de culo en el arroyo. Cuando trato de levantarme, un relámpago de dolor me atraviesa el tobillo.
Hago una respiración ujjayi profunda para mantener la calma, la firmeza, la fuerza. Con la serpiente bien agarrada, voy a la pata coja hasta una roca grande. Mientras me quito la mochila, la serpiente me saca la lengua. Debe de tomarme por loca.
Se me ocurren cosas peores que estar loca. Es mejor ser una loca que una pusilánime. O tímida, o sumisa, o aburrida.
Saco de la mochila el tarro de cristal que he traído para mis capturas de ofidios.