Tanto tiempo añorando un bebé en el reino tranquilo… Cuando al fin nace Sara, los reyes rozan la felicidad completa, solo hay un pequeño inconveniente: la princesa simboliza la dicha, pero no hace honor al lugar en el que ha venido al mundo. De personalidad arrolladora, la pequeña es un terremoto incansable que trae de cabeza a toda la corte. Brujas y hechiceros sugieren varios conjuros para calmar los ánimos de la nueva inquilina del palacio de Alotroladodelmundo, hasta que los padres reparan en la verdadera solución: aceptar a cada uno tal y cómo es y potenciar sus habilidades. Los autores, a través de un estilo caricaturesco que busca en todo momento cultivar la sonrisa del lector infantil, ofrecen un giro de tuerca a las narraciones tradicionales sobre príncipes y princesas, esbozando un trastorno de conducta cada vez más común en la sociedad actual que ayuda a normalizar este tipo de situaciones. Original y divertido.
Tanto tiempo añorando un bebé en el reino tranquilo… Cuando al fin nace Sara, los reyes rozan la felicidad completa, solo hay un pequeño inconveniente: la princesa simboliza la dicha, pero no hace honor al lugar en el que ha venido al mundo. De personalidad arrolladora, la pequeña es un terremoto incansable que trae de cabeza a toda la corte. Brujas y hechiceros sugieren varios conjuros para calmar los ánimos de la nueva inquilina del palacio de Alotroladodelmundo, hasta que los padres reparan en la... Seguir leyendo
La princesa Sara no para
En un reino tranquilo, donde el tiempo pasaba sin prisa, nació la princesa Sara.
Los reyes estaban felices. Siembre habían querido tener una niña para peinar
sus cabellos con tirabuzones y vestirla con prendas delicadas.
Sara era muuy curiosa y pronto aprendió a gatear.
- ¡Majestad! ¡La princesa Sara no para! -gritaba el jardinero.