Los animales humanizados que protagonizan este álbum simbolizan con sus acciones el miedo, el frío, las penurias y la constante amenaza de quienes, ante la desesperación, optan por jugarse la vida para huir de la muerte. La noche, el mar oscuro, los personajes indeseables… cuantas amenazas deben sortear tantas miles y miles de personas en busca de un futuro mejor. La artista peruana compone una veintena de lienzos inolvidables, dignos de ser expuestos en cualquier galería de arte. En esos paisajes lúgubres destaca la luz que emana de los personajes, un puñado de valientes familias que tendrán que hacer frente a todo tipo de dificultades. La fuerza expresiva de las imágenes es suficiente para emocionar al lector, sin necesidad de palabras, en un proyecto de singular belleza que ha sido incluido entre las mejores obras editadas en 2019 por los especialistas de Canal Lector. Watanabe, que ya sorprendió con su fusión de técnicas en ¡Más te vale, mastodonte!, confirma su personal e indiscutible elegancia con un relato tan bello como necesario, desgraciadamente, en los tiempos que corren.
Los animales humanizados que protagonizan este álbum simbolizan con sus acciones el miedo, el frío, las penurias y la constante amenaza de quienes, ante la desesperación, optan por jugarse la vida para huir de la muerte. La noche, el mar oscuro, los personajes indeseables… cuantas amenazas deben sortear tantas miles y miles de personas en busca de un futuro mejor. La artista peruana compone una veintena de lienzos inolvidables, dignos de ser expuestos en cualquier galería de arte. En esos paisajes lúgubres destaca la... Seguir leyendo