Ernesto es aparentemente feliz en su realidad cotidiana. Vive en un ciclo que se repite en bucle junto a la manada: caminar, comer y beber durante el día, dormir durante la noche. Pero el paso junto a la selva despierta la curiosidad del pequeño elefante que inicia una traviesa e inconsciente incursión aprovechando un descuido de los mayores. En su interior, cautivado por todo lo que allí acontece, pronto se desorienta y debe buscar la ayuda de los animales residentes. En ese camino descubrirá tanto las facetas insospechadas de cada especie, todas ellas insolidarias, como la empatía de un habitante inesperado, que le devuelve a la buena senda. Como en todos los trabajos del veterano autor e ilustrador británico, las descripciones de los animales humanizados y la representación de los escenarios selváticos que el protagonista recorre captan toda la atención del lector y consiguen trasladar la inquietud del pequeño paquidermo ante la escasa solidaridad de los vecinos que encuentra. Un álbum emotivo, de corte clásico, que permite reflexionar sobre el individualismo que, muchas veces, preside la sociedad actual.
Ernesto es aparentemente feliz en su realidad cotidiana. Vive en un ciclo que se repite en bucle junto a la manada: caminar, comer y beber durante el día, dormir durante la noche. Pero el paso junto a la selva despierta la curiosidad del pequeño elefante que inicia una traviesa e inconsciente incursión aprovechando un descuido de los mayores. En su interior, cautivado por todo lo que allí acontece, pronto se desorienta y debe buscar la ayuda de los animales residentes. En ese camino descubrirá tanto las facetas... Seguir leyendo
Ernesto el elefante
Ernesto vivía con su madre y el resto de la manada.
Durante el día, caminaban, comían y bebían y, por las noches, dormían.
Ernesto se sentía feliz, pero últimamente se preguntaba qué otras cosas había en la vida además de caminar, comer, beber y dormir.