Diversión, intriga, misterio… Las andanzas de Pepa, modeladas con ingredientes y aromas de reconocibles clásicos, son sin embargo aventuras originales y frescas que desintegran estereotipos. Pequeñas historietas con cierta ligazón en las que descubrimos que los padres separados se pueden llevar bien o que las madrastras no se parecen en nada a las de los cuentos. Al hilo de las acciones y reflexiones de la protagonista, el libro exuda vitalidad y optimismo gracias a la simpáticas ilustraciones de Eugenia Ábalos, que fusiona distintos estampados y tonalidades cercanas a las de esas estancias azulejadas tan populares en buena parte de la geografía española, a partir de la combinación de distintas técnicas: lápices de colores, acuarelas, guache.... La trama bebe también de los recuerdos infantiles de la escritora -creadora, por ejemplo, de la célebre saga Familia a la fuga-; con presencia importante de la cultura gastronómica y determinadas travesuras habituales en anteriores generaciones, como la que da origen al argumento (y que su hermana pequeña imita desencadenando varios hilos narrativos). A modo de anécdota señalar que las portadillas de los capítulos simbolizan algunos de los lances más importantes de cada capítulo.
Diversión, intriga, misterio… Las andanzas de Pepa, modeladas con ingredientes y aromas de reconocibles clásicos, son sin embargo aventuras originales y frescas que desintegran estereotipos. Pequeñas historietas con cierta ligazón en las que descubrimos que los padres separados se pueden llevar bien o que las madrastras no se parecen en nada a las de los cuentos. Al hilo de las acciones y reflexiones de la protagonista, el libro exuda vitalidad y optimismo gracias a la simpáticas ilustraciones de Seguir leyendo
Pepa Guindilla
Todo fue por culpa de un escupitajo. Mi hermana Sophie y yo, listas para el ataque, sin saber que minutos después pondrían precio a nuestras cabezas.
No hay nada más divertido que tirar un escupitajo por el hueco de la escalera. ¿Lo habéis probado?