La convivencia se basa en el respeto, un valor que es preciso conocer, inculcar y apreciar desde la más tierna infancia. A partir de sencillas explicaciones y siguiendo la línea didáctica de sus últimas publicaciones, Lucía Guerrero esboza conceptos que ayudarán al pequeño a entender lo diferentes y, a la vez, únicos que somos todos los que compartimos nuestro tiempo a diario. Partiendo del ejemplo de los amigos y compañeros de clase, y de sus aficiones, preferencias y puntos de conflicto, y utilizando algunos de los elementos propios del lenguaje del cómic, divertidos y variados personajes deambulan, en fondos vacíos, por un relato que radiografía la complejidad que siempre generan las relaciones personales para llegar a varias conclusiones en las que, con seguridad, todos estaremos de acuerdo: la obligatoriedad de tratarnos bien y denunciar las burlas o abusos, la concienciación de que estamos sumidos en un aprendizaje continuo a lo largo de toda la vida, la importancia de decir la verdad y asumir equivocaciones y errores para arreglar las cosas... Un manual para educar en positivo que puede servir como refuerzo complementario a algunos debates en el entorno escolar.

La convivencia se basa en el respeto, un valor que es preciso conocer, inculcar y apreciar desde la más tierna infancia. A partir de sencillas explicaciones y siguiendo la línea didáctica de sus últimas publicaciones, Lucía Guerrero esboza conceptos que ayudarán al pequeño a entender lo diferentes y, a la vez, únicos que somos todos los que compartimos nuestro tiempo a diario.... Seguir leyendo