Las ventanas de nuestros hogares son un excitante canal de comunicación exterior, también el puerto de entrada para muchas emociones, el oído al que se cuentan los secretos de la casa, el espacio con el que el edificio se ajardina. Desde pequeños vemos, a través de los cristales, paisajes, horizontes, sueños... Da igual el lugar desde el que se ejerza esta condición: el ojo de buey de un barco en alta mar, el agujero de un iglú, el periscopio de un submarino... Si observamos con atención veremos pájaros posados en el alféizar, ideas a punto de convertirse en realidad, nubes con formas variables, versos esperando a ser compuestos. Muchos de ellos ya han sido capturados, al vuelo, por Dani Espresate. El autor regala una completa y variada puesta en escena, con troquel incluido, en el que afloran palabras cruciales para componer un ideario perfecto: libertad, imaginación, alegría, valentía, resiliencia cuando los días son grises. Marta Comín viste con elegancia cada poema configurando un ingenioso juego visual en el que no faltan las referencias metaliterarias, todas ellas provenientes de la literatura infantil, recogidas en la última página.
Las ventanas de nuestros hogares son un excitante canal de comunicación exterior, también el puerto de entrada para muchas emociones, el oído al que se cuentan los secretos de la casa, el espacio con el que el edificio se ajardina. Desde pequeños vemos, a través de los cristales, paisajes, horizontes, sueños... Da igual el lugar desde el que se ejerza esta condición: el ojo de buey de un barco en alta mar, el agujero de un iglú, el periscopio de un submarino... Si observamos con atención veremos... Seguir leyendo
Ventanas
Las ventanas de mi hogar
están abiertas al mundo.
Cuando el viento me visita,
me regala su canción.
Y me cuenta los secretos
de los bosques más lejanos
y me pinta las paredes
con el reflejo del sol.
El hogar se abre en flor,
el edificio ajardina
y la gata impasible
se hace
nenúfar
sin tiempo.