Un niño y un hámster van a iniciar una sugerente sesión de lectura compartida. Están todos los elementos necesarios para disfrutar al máximo del texto: un sofá aparentemente confortable, una lámpara, silencio, tranquilidad, ¡hasta palomitas!... ¿Cómo se van a perder este mágico momento el resto de amigos -todos ellos animales humanizados-? El roedor decide avisar a los demás que se incorporan paulatinamente, conformando una estructura de narración acumulativa, en perfecta armonía. Da igual que se trate de depredadores como de pequeños peces en cautividad cuando hay un buen libro delante. Lo malo es que las plazas del sillón son limitadas, pero esto genera divertidos problemas (físicos) de convivencia, que termina por complicar un enorme invitado inesperado. Sin embargo, y esto lo sabes bien, no hay nada que pueda impedir una celebración cuando hay ilusión común y un buen texto como base. La autora alemana, con larga y acreditada experiencia en la narración secuencial (alguno de sus textos ha sido adaptado al cine); construye una seductora propuesta gráfica en trazos limpios, con personajes de rasgos caricaturescos y un luminoso tratamiento del color, que no precisa de muchas palabras para divertir y, al mismo tiempo, reivindicar la magia de la narración oral.
Un niño y un hámster van a iniciar una sugerente sesión de lectura compartida. Están todos los elementos necesarios para disfrutar al máximo del texto: un sofá aparentemente confortable, una lámpara, silencio, tranquilidad, ¡hasta palomitas!... ¿Cómo se van a perder este mágico momento el resto de amigos -todos ellos animales humanizados-? El roedor decide avisar a los demás que se incorporan paulatinamente, conformando una estructura de narración acumulativa, en... Seguir leyendo
LA HORA DEL CUENTO
- Ven, vamos a leer un cuento -dice el niño.
- ¡QUÉ BIEN! -grita contento el hámster-. Voy a buscar a los demás.
Ya podemos empezar.
La cebra, el gato, el niño, el hámster
y el león leen un...
- ¡ESPERA! -brama la cebra-.
¡La cigüeña aún no ha llegado!