La familia Oso disfruta de una jornada campestre en donde, presumiblemente, se relajará y dará rienda suelta a sus aficiones en armonía y relax, pero el ejemplo que papá da a su hijo en cada una de las acciones parece poco edificante, generando frustración en el pequeño, que no puede disfrutar de sus verdaderos y sensibles intereses "obligado" a cumplir con los estándares de fortaleza y valentía que se asocian a los plantígrados. Pero, al caer la noche, el más grande del clan se dará cuenta que ser un "oso de verdad" no es lo que él imagina. Con humor, pero poniendo de manifiesto la pervivencia de esas ideas tóxicas que pueden perjudicar la formación de la personalidad de los descendientes, los autores ofrecen un cuento alejado de las convencionales y tradicionales historias para el público infantil, propias de otro tiempo, que continúa la serie iniciada en "Ricitos de Oso", parodia del célebre cuento de hadas anónimo en el que se realizaba una crítica del sexismo. Laetitia Le Saux, en el apartado gráfico, configura personajes y escenas con los elegantes y tiernos diseños a los que nos tiene acostumbrados.
La familia Oso disfruta de una jornada campestre en donde, presumiblemente, se relajará y dará rienda suelta a sus aficiones en armonía y relax, pero el ejemplo que papá da a su hijo en cada una de las acciones parece poco edificante, generando frustración en el pequeño, que no puede disfrutar de sus verdaderos y sensibles intereses "obligado" a cumplir con los estándares de fortaleza y valentía que se asocian a los plantígrados. Pero, al caer la noche, el más... Seguir leyendo
Un oso de verdad
Hoy, la familia Oso va de pícnic al bosque.
- ¡Qué bien se está sin hacer nada! -exclama Papá Oso.
- Pues sí -dice Mamá Oso, cargada con las bolsas y capazos de la comida.
Osito corretea detrás de ellos, muy contento.