El pequeño tigre está muy triste porque sufre mal de amores: su querida Maya Papaya ha besado al topo. Su amigo osito decide ayudarle y le prepara mousse de manzana. Poco a poco los diversos animales van invitando a sus amigos a comer sus platos favoritos. Pero no se trata sólo de alimentos nutritivos y sabrosos sino de remedios para alegrar el alma, aumentar las ganas de vivir, tener mucha energía o vencer el dolor de pies. Paralelamente a las aventuras de oso y sus amigos se van indicando las recetas de cada plato.
El pequeño tigre está muy triste porque sufre mal de amores: su querida Maya Papaya ha besado al topo. Su amigo osito decide ayudarle y le prepara mousse de manzana. Poco a poco los diversos animales van invitando a sus amigos a comer sus platos favoritos. Pero no se trata sólo de alimentos nutritivos y sabrosos sino de remedios para alegrar el alma, aumentar las ganas de vivir, tener mucha energía o vencer el dolor de pies. Paralelamente a las aventuras de oso y sus amigos se van indicando las recetas de cada plato.
Mousse de manzana para las penas de amor
Un día que el pequeño oso volvía a casa con su caña de pescar, se encontró al pequeño tigre sentado en el suelo tras una canasta. Lloraba como un perrito lastimero y parecía una nube cargada de lluvia.
«¿Qué te sucede, viejo amigo?», le preguntó. «¿Estás herido? ¿Qué es lo que apena tu corazón y tu alma de esta manera?»
«Me duele el cuerpo y el alma», gimoteó el tigrecito. «Sufro mal de amores».