Las dragonas no muerden
¡Por fin vacaciones de verano! Durante seis semanas, Daniel puede hacer lo que le venga en gana. Y lo mismo su vecina Amelia, aunque a Daniel hoy no le importa demasiado lo que haga Amelia, pues tiene reunión de caballeros y hay que preparar algunas cosas. Cosas muy importantes en las que las chicas sólo estorbarían, sobre todo, Amelia y sus amigas.
Daniel está sentado en su habitación mirando su nuevo reloj. Se lo han regalado sus padres por las buenas notas que ha sacado en tercero.