La niña protagonista juega a ser inventora como su papá. Por accidente, una de sus creaciones cobra vida y se convierte en su gato mascota. Este es el argumento central de una historia que mezcla realidad y fantasía, y en la que los adultos se convierten en cómplices del juego de su hija. La narración de la niña en primera persona ofrece una visión ingenua del suceso y lo hace más creíble para el pequeño lector. Las ilustraciones, de vivos colores, tienen abundantes detalles que describen el acogedor entorno en el que viven los personajes.La niña protagonista juega a ser inventora como su papá. Por accidente, una de sus creaciones cobra vida y se convierte en su gato mascota. Este es el argumento central de una historia que mezcla realidad y fantasía, y en la que los adultos se convierten en cómplices del juego de su hija. La narración de la niña en primera persona ofrece una visión ingenua del suceso y lo hace más creíble para el pequeño lector. Las ilustraciones, de vivos colores, tienen abundantes detalles que describen el acogedor entorno en el que viven los personajes.
Mi gata Eureka
Papá es un genio, y no lo digo sólo porque sea mi padre. Es un inventor. Se pasa todo el día en su taller del sótano. ¡Y a veces también se pasa toda la noche allí! Cuando está concentrado en un nuevo invento, se olvida de todo lo demás. A mí me encanta verle trabajar.