Libro para los más pequeños, con un sencillo argumento y destinado a reconocer objetos. La gracia del dibujo, los tonos de los fondos y el juego de algunas medias páginas, que se superponen y hacen variar parte de la escena, son una propuesta de renovación digna de tenerse en cuenta. Si los diálogos carecen de interés, el dibujo, rico en detalles, permite mirarlo con detenimiento y jugar a nombrar lo que allí se ve.
Libro para los más pequeños, con un sencillo argumento y destinado a reconocer objetos. La gracia del dibujo, los tonos de los fondos y el juego de algunas medias páginas, que se superponen y hacen variar parte de la escena, son una propuesta de renovación digna de tenerse en cuenta. Si los diálogos carecen de interés, el dibujo, rico en detalles, permite mirarlo con detenimiento y jugar a nombrar lo que allí se ve.
Nina y Tina juegan con las olas
En el colegio las llaman las pequeñas gemelas, aunque la verdad es que son muy diferentes. Sus nombres son muy bonitos: la rubia se llama Nina y la pelirroja, Tina.
Nina y Tina pasan las vacaciones con su padre.
-Tina, ¿has visto qué resistente me ha quedado este canal, con tantas conchas?
-Pon muchas más. No quiero que el mar se lleve mi castillo. Papá, ¡mira qué alto es!