Una niña recibió un día un regalo: era un oso de peluche. Este creía que se llamaba «No tocar», porque era lo que ponía en el cartel que había en la tienda junto a él. Así que no le gustaba nada que le manosearan y cada vez estaba más estropeado. Pero la niña no parecía darse cuenta y jugaba todo el rato con él. Un día el oso le contó al conejo de peluche que ya nadie le admiraría, y este le contestó que hay algo mejor que la admiración: el amor. Pero el oso aún no sabe lo que es eso. Tendrá que descubrirlo por sí mismo.
Una niña recibió un día un regalo: era un oso de peluche. Este creía que se llamaba «No tocar», porque era lo que ponía en el cartel que había en la tienda junto a él. Así que no le gustaba nada que le manosearan y cada vez estaba más estropeado. Pero la niña no parecía darse cuenta y jugaba todo el rato con él. Un día el oso le contó al conejo de peluche que ya nadie le admiraría, y este le contestó que hay algo mejor que la admiración: el amor. Pero... Seguir leyendo
El regalo perfecto
Había una vez una niña a la que un día le regalaron un oso de peluche. La niña no era ni demasiado grande ni demasiado pequeña. Era un poco como tú.
Era el regalo perfecto, un oso de peluche de lo más especial. Tenía la piel blanca y suave, llevaba puesto un gracioso sombrero de color rojo y en su pecho había una llave mágica... Cuando se giraba la llave, el oso cantaba una canción. El oso estaba muy orgulloso de ser tan elegante.