Para aprender las letras hay que verlas; para verlas hay que encontrarlas; para encontrarlas hay que buscarlas en las imágenes de este Abcediario activo. Cada letra formando parte de una instalación surrealista: un diseño con una foto ilustrada. Una propuesta atrevida, más allá de la mera ilustración infantil: una locura a medio camino entre el silencio de la mímica y el sonido de lo cotidiano... ¡Quizá todas las letras sean sordas! ¡Y todas las vocales, abiertas... oh, sorpresa... como mi boca!
Para aprender las letras hay que verlas; para verlas hay que encontrarlas; para encontrarlas hay que buscarlas en las imágenes de este Abcediario activo. Cada letra formando parte de una instalación surrealista: un diseño con una foto ilustrada. Una propuesta atrevida, más allá de la mera ilustración infantil: una locura a medio camino entre el silencio de la mímica y el sonido de lo cotidiano... ¡Quizá todas las letras sean sordas! ¡Y todas las vocales, abiertas... oh, sorpresa... como mi boca!
ABC diario
¿Qué se oculta entre una letra y otra?
En este cáucaso de posibilidades aún por formular late una presencia.
Presencia no dicha, que encarna y ampara la misma letra, sonido, verbo.
¿Es el silencio espacio del dios? ¿La sombra primera para otros?
Quizá, algo tan cercano como la fulgurante y cómica aventura
de nuestra cotidianidad.