Este álbum troquelado, en el que se dedica una página por angelito, está lleno de ternura. Con él la magia de la Navidad resurge, y los sentimientos que en ella afloran: bondad, solidaridad, etc. Las ilustraciones amables de Else Wenz-Viëtor, a color y en blanco y negro, contribuyen a crear un clima apacible y cálido. Un libro para compartir en familia, con el que los niños podrán participar inventando más angelitos que puedan solucionar problemas que ellos conocen. Y al final, un villancico para cantar en Navidad.
Este álbum troquelado, en el que se dedica una página por angelito, está lleno de ternura. Con él la magia de la Navidad resurge, y los sentimientos que en ella afloran: bondad, solidaridad, etc. Las ilustraciones amables de Else Wenz-Viëtor, a color y en blanco y negro, contribuyen a crear un clima apacible y cálido. Un libro para compartir en familia, con el que los niños podrán participar inventando más angelitos que puedan solucionar problemas que ellos conocen. Y al final, un villancico para cantar en Navidad.
Diez angelitos
Diez angelitos revolotean. Brilla la luna en la nieve.
Un cervatillo está hambriento, porque la hierba escasea.
Un angelito le lleva hierba y todos los animalitos contentos se acercan.
Por no poder ir al bosque a buscar un abeto, hay una abuelita muy triste en su cabaña. Qué desilusión para su nieto.
El segundo angelito le lleva raudo un abeto pequeño que encontró en el bosque, caído y sin dueño.
Un buen anciano lleva un gran saco con regalos para los niños. ¡Pero le pesa tanto!