Ester García Cortésnació en Cáceres en 1984 y estudió Bellas Artes en Salamanca, ciudad en la que comenzó a dedicarse profesionalmente a la ilustración, una afición a la que dedicaba horas y horas desde muy pequeña.
Casi a la vez que completaba su formación académica en la ciudad castellana, empezó a publicar con editoriales como Anaya, SM u Oxford, además de realizar numerosos proyectos gráficos para entidades como la Fundación Germán Sánchez Ruipérez, entre otras.
Tras la etapa salmantina se trasladó a Madrid para ampliar sus estudios (realizó el IV Máster de Promoción de la Lectura y Literatura Infantil de la Universidad de Castilla-La Mancha); y participar en diversos cursos y talleres. Desde entonces reside y trabaja en la capital como ilustradora freelance para todo tipo de editoriales y clientes, tanto nacionales como internacionales.
Representada por la agencia británica Good Illustration, sus poéticas composiciones han cautivado a todo tipo de públicos, aunque la mayor parte de su trabajo está enmarcado en la literatura infantil. Su estilo abarca todo tipo de técnicas, con especial predilección por el grafito, la acuarela y los lápices de colores, utilizando el ordenador en el proceso de digitalización para "limpiar" las imágenes, añadir texturas y sombras.
A lo largo de todos estos años ha sido reconocida con numerosos galardones y con reseñas positivas en medios de gran prestigio internacional. Su trabajo fue exhibido en la 30ª edición de Le immagini della fantasia en Sarmede o Ilustrarte (Portugal) y formó parte del IV Catálogo Iberoamericano de Ilustración o de la selección OEPLI 2017 sobre LIJ en España. También obtuvo en su día el Premio Dragón Lector y algunos de sus proyectos fueron inclidos en la Mostra Internazionale d'Illustrazione per l'Infanzia de Sàrmede (Italia).
Entrevista a Ester grabada en la sede de Canal Lector en 2013
Entre sus últimos proyectos figura la exposición itinerante Tú y yo no somos como todo el mundo, en la que 20 ilustradores interpretan el universo cinematográfico de Almodóvar; o las obras ¿Qué soñarán las camas? (con Mar Benegas, para Libre Albedrío); la colección Filipo y Leo (junto a Adolfo Serra, en Edelvives); o La selección natural, una espectacular recreación de los textos originales de Charles Darwin editada por Nórdica (Premio Junceda Internacional)
En la entrevista que mantuvimos con ella hace unos años habla de la línea clásica que marcaba su estilo, centrado por aquel entonces en explorar lo real y sus elementos mágicos hasta llegar a su extremo imposible. “Ahora me mantengo en ese camino, quién sabe más adelante.
La obra de esta autora ha recibido grandes elogios por la crítica especializada. Cuando se publicó Por qué los gatos no llevan sombrero, Cecilia Frías señalaba en El Cultural que se trataba de “una inteligente metáfora para que padres e hijos nos miremos ante el espejo con objeto de recapacitar sobre las esclavitudes que, sin apenas darnos cuenta, nos vamos imponiendo al acumular coches, juguetes y otras pertenencias que, pasado el primer impulso, no conseguirán hacernos más felices”.
Ester ha contado en algunas entrevistas, algunas de las cuales recoge en su página web, que su personaje favorito es Alicia y su obra predilecta Donde viven los monstruos, de Maurice Sendak. También cómo desde niña –“En casa había de todo”– gozaba con cuentos e ilustraciones: los libros ilustrados de su madre, profesora de educación infantil, los de arte de su padre, y los carteles de la zapatería de su abuelo, en los que ella dibujaba por detrás. Después fueron decisivos sus estudios de Bellas Artes y sus primeros trabajos para la Fundación Germán Sánchez Ruipérez en Salamanca.
La naturaleza, la literatura, el arte, los viajes… le sirven a Ester García para pensar sus obras. También “cualquier elemento cotidiano que encuentre alrededor y que me entusiasme”. Sus técnicas favoritas son el grafito, acuarela y lápices de colores. Emplea el ordenador en el proceso de digitalización, limpiando las imágenes, añadiendo texturas o algunas sombras.
