Con el objetivo de ayudar a la industria editorial española especializada en literatura infantil y juvenil y en cómic, Canal Lector lanzó una encuesta a principios del mes de julio para evaluar algunos de los aspectos fundamentales en los que la crisis sanitaria ha repercutido en 2020 en este sector y ayudar a identificar los nuevos escenarios que se presentan en los próximos meses.

Gracias a la respuesta de los distintos sellos, conocemos el impacto real de los primeros meses y las opiniones de los principales sellos, distribuidos en seis campos diferentes:

1. Impacto aproximado de la crisis en el volumen de ventas durante el primer semestre

Comentarios adicionales recogidos:

- El hecho de que estuvieran cerradas por tanto tiempo nuestro principal canal de venta (las librerías), ha provocado que la facturación haya dado uno de los bajones más importantes de la historia de la edición.

- En marzo no se vendió nada; en abril, un poco, en mayo y en junio se produjeron numerosas devoluciones y apenas hubo ventas. La venta a las bibliotecas, que para nosotros era un ingreso importante, se paralizó drásticamente.

2. Consumo en otros soportes. ¿La editorial trabaja en formato electrónico?
¿Cuál ha sido el incremento en el interés por parte del usuario que habéis advertido?

3. Nuevos títulos en el catálogo. ¿Ha sido el ritmo de incorporación de novedades el mismo que en anteriores periodos?

Comentarios adicionales recogidos:

- Las novedades sufrieron un retraso de dos meses en su publicación pero han sido las mismas de otros años.

- El ritmo de las publicaciones de primavera 2020, aunque se haya publicado el mismo número de novedades, ha sido más lento, dando prioridad a las reediciones.

- Nuestra empresa es muy pequeña. Pero, teníamos un lanzamiento previsto en primavera, que hemos pospuesto al otoño y uno de los títulos que íbamos a sacar en otoño lo hemos pospuesto hasta el año próximo.

4. Relación comercial con distribuidores. ¿La producción ha seguido el mismo ritmo o se ha incrementado el número de devoluciones?

Comentarios adicionales recogidos:

- A fecha de hoy se han producido pocas devoluciones, pero no somos optimistas. Creemos que el panorama cambiará este mes o el siguiente.

5. Ideas. ¿Qué medidas deberían adoptarse con carácter urgente para paliar el impacto de esta crisis en el sector?

Algunas de las respuestas aportadas por los editores/as han sido las siguientes:

- Volver a las compras de bibliotecas y colegios.

- Publicar más.

- Ayudas del Gobierno a las bibliotecas para comprar a través de librerías.

- Compras institucionales de libros.

- Ayudas a la comunicación comercial online.

- Reclamar a las administraciones más recursos para las bibliotecas tanto escolares como públicas, subvenciones para las editoriales como ya se ha hecho en otros países europeos.

- El libro es cultura, por lo tanto, deberíamos trabajar con el Ministerio de Cultura en el proyectos de fomento a la lectura y la educación.

- Ahora más que nunca se requiere una reunión de editores, libreros y editores remando en el mismo sentido.

- Compra institucional para bibliotecas públicas y escolares, bonos de compra de libros en librerías, incremento del programa de ayudas a la edición.

- Compra de bibliotecas generales y escolares a través de las librerías. Fomento de la lectura.

- Bono para gastar en libros. Compras por parte de bibliotecas escolares y bibliotecas municipales. Ayudas a las librerías, que son las que sostienen a las editoriales independientes.

- Compras institucionales por parte de bibliotecas manteniendo la cadena del libro pero teniendo en cuenta no solo a los grandes grupos (como siempre) también a las pequeñas editoriales que realizan edición de calidad, y la creación bibliotecas escolares con diversidad de fondo editorial.

6. Teniendo en cuenta el contexto y la legislación actual
¿Cuál crees que son las expectativas del sector infantil y juvenil en los próximos 6 meses?

Algunas de las respuestas aportadas por los editores/as han sido las siguientes:

- De "bajada".

- Inferior número de novedades.

- A la baja.

- Difícil saberlo ante la incertidumbre de posibles nuevos brotes del COVID 19.

- Las mismas que antes.

- Sigue siendo el sector que mejor ha agunantado al crisis, esperamos que estos meses sean favorables ya que vienen las campañas fuertes del libro.

- Negativos o muy negativos, en función de si hay repunte.

- Bajas.

- Penosos. Las librerías rebosan novedades y en el otoño la mayoría no tendrán ni capacidad para absorber la avalancha de títulos que se prevee. Mientras, no hay más público en librerías del que había antes, solo mayor número de libros. Además, muchísimas editoriales de adultos tienen ya sellos de LIJ. Con ese panorama, es imposible que un título destaque. Los libreros no les dan oportunidades más allá de un mes.

- Bajada muy significativa en ventas y oferta muy limitada de títulos y contenidos diversos o innovadores. La situación va a ser complicada para todo el sector y los profesionales independientes que dependen de él (autores, ilustradores, correctores, maquetadores, etc)..

- Estabilización.

7. Esbozar razones para el optimismo. ¿Crees que el gráfico de ventas y consumo de libros en formato tradicional y electrónico será una "V"
-decrecimiento y rápido repunte una vez se normalice esta situación-?

Comentarios adicionales recogidos:

- No, soy pesimista y no creo que haya una “V” sino que tardaremos muchos años en recuperar el nivel anterior.

- Vemos solamente efectos positivos por las ventas durante la crisis.

- Nos mantenemos en un prudente escepticismo. Pero dudamos mucho que el gobierno tome medidas adecuadas y de esta crisis es imposible salir sin ayudas políticas. Habría que redibujar otro país donde la cultura y la ciencia tuvieran preeminencia y no fueran residuales. No creeemos que las escuelas se trabaje la lectura lo suficiente, desde luego no en los hogares y los niños tienen demasiadas ofertas de ocio para sentarse a leer (lo que implica soledad, silencio y concentración). Por otro lado, la
industria editorial sigue empeñada en una carrera sin fin por publicar novedades. Y si no se producen un montón de carambolas (el boca a boca, buena crítica, una
comentario afortunado en las redes sociales) ningún libro tiene vida más allá de su primer mes.