La puerta oscura. El Mal
Aunque todavía quedaba lejos la hora de levantarse para ir a clase, Pascal Rivas estaba ya despierto. Permanecía sobre la cama con los ojos cerrados, su delgada figura tendida en una postura cómoda, meditando. El día anterior había tomado una decisión trascendental que le hacía recordar una incómoda ansiedad: interrumpir la cuarentena impuesta por Daphne, la pitonisa, desde que retornara del Más Allá tras su último viaje.
Sí, mantener durante unas semanas la rutina del
lycée había sido una buena idea para evitar llamar la atención de la policía tras todo lo sucedido en los meses previos; pero Pascal no soportaba más aquella postiza tranquilidad...