Una antología lúdica de poemas de Gabriela Mistral. Versos para leer, escuchar y jugar. Llenos de música y de imágenes, son una visita agradecida a los campos y los pueblos de América Latina. Están precedidos de un excelente prólogo de Federico Martín Nebras.Una antología lúdica de poemas de Gabriela Mistral. Versos para leer, escuchar y jugar. Llenos de música y de imágenes, son una visita agradecida a los campos y los pueblos de América Latina. Están precedidos de un excelente prólogo de Federico Martín Nebras.
Ronda de astros
Ésta era una niña de cera, pero no era una niña de cera, era una gavilla parada en la era... Se llamaba Lucila, pero no, se llamaría Gabriela, y había nacido en Vicuña, Chile, allá por el Valle de Elqui, ceñido de cien montañas o de más.