Acuarelas de tintes sombríos ilustran acertadamente en este álbum intimista el conflicto y el dilema de la gente corriente ante la guerra. Después de que un hombre ha tomado la decisión de convertirse en soldado, su mujer le hace ver las cosas de otro modo. Entre las muchas formas de hacer un alegato pacifista, esta, focalizada en dos seres humanos anónimos de cualquier lugar del mundo que ante la fractura del conflicto bélico contraponen sus puntos de vista, es sin duda una de las más eficaces. Un álbum para lectores que ya han madurado, de cualquier edad.
Acuarelas de tintes sombríos ilustran acertadamente en este álbum intimista el conflicto y el dilema de la gente corriente ante la guerra. Después de que un hombre ha tomado la decisión de convertirse en soldado, su mujer le hace ver las cosas de otro modo. Entre las muchas formas de hacer un alegato pacifista, esta, focalizada en dos seres humanos anónimos de cualquier lugar del mundo que ante la fractura del conflicto bélico contraponen sus puntos de vista, es sin duda una de las más eficaces. Un... Seguir leyendo
La partida del soldado
–Tengo que partir –dijo el soldado.
–¿Quién te lo pide? –preguntó la mujer.
–La patria.
–Tu patria soy yo. Y nuestros hijos.
–¡La guerra se acerca! Y yo tengo que luchar.
–¡Luchar! ¿Para qué?