Un cuento dirigido a los primeros lectores que trata el tema de la guerra y pone de relieve su absurdo y sinsentido. Al mismo tiempo, subraya la inteligencia y naturalidad con la que reaccionan los niños, quienes dan un ejemplo de tolerancia y de amistad a los mayores. Con sus ilustraciones minuciosas y llenas de detalles, el autor consigue dar un indudable realismo a la historia que nos está contando.Un cuento dirigido a los primeros lectores que trata el tema de la guerra y pone de relieve su absurdo y sinsentido. Al mismo tiempo, subraya la inteligencia y naturalidad con la que reaccionan los niños, quienes dan un ejemplo de tolerancia y de amistad a los mayores. Con sus ilustraciones minuciosas y llenas de detalles, el autor consigue dar un indudable realismo a la historia que nos está contando.
Los niños no quieren la guerra
¡Qué hermoso era aquel país donde se habían instalado!
Allí habían construido dos castillos, uno tan bonito como el otro.
Los dos reyes se llevaban muy bien, sus súbditos también.
Los hijos de los unos jugaban con los hijos de los otros.