Un pescador se embarca para demostrar a sus vecinos que el sol y la luna son seres diferentes. A lo largo del viaje, el protagonista se encuentra con diferentes pesonajes que le ayudan a confirmar su teoría y a descubrir las diferentes fases por las que pasa nuestro satélite. Leyenda Maorí reinterpretada por la autora en una obra de texto sencillo e ilustraciones elaboradas con diferentes texturas, materiales y técnicas, que la han hecho merecedora del premio Internacional Álbum ilustrado 2012.
Un pescador se embarca para demostrar a sus vecinos que el sol y la luna son seres diferentes. A lo largo del viaje, el protagonista se encuentra con diferentes pesonajes que le ayudan a confirmar su teoría y a descubrir las diferentes fases por las que pasa nuestro satélite. Leyenda Maorí reinterpretada por la autora en una obra de texto sencillo e ilustraciones elaboradas con diferentes texturas, materiales y técnicas, que la han hecho merecedora del premio Internacional Álbum ilustrado 2012.
El hombre que quiso conocer a la Luna
En la plaza había barullo. El pescador y el comerciante peleaban de nuevo: -¡Son dos!- gritaba el pescador-. ¡La Luna y el Sol son dos seres distintos! -¡Calla, zoquete! ¿No ves que solo hay uno? -respondía el comerciante y, furioso, le propinó un golpetazo al pescador.