Clara está enamorada de Lucas, pero no es el chico más adecuado para ella. Y no se da cuenta de que, más cerca de lo que cree, tiene otro amigo que podría hacerla feliz. Después de muchos wasaps, consejos y sorpresas, deberá decidirse por la opción que más le conviene. El estilo realista y desenfadado de Begoña Oro vuelve a sorprender con una historia muy actual, deliciosa, sencilla y cotidiana… como una croqueta, en la que invita a lanzarse a la vida y buscar la felicidad a grandes bocados.
Clara está enamorada de Lucas, pero no es el chico más adecuado para ella. Y no se da cuenta de que, más cerca de lo que cree, tiene otro amigo que podría hacerla feliz. Después de muchos wasaps, consejos y sorpresas, deberá decidirse por la opción que más le conviene. El estilo realista y desenfadado de Begoña Oro vuelve a sorprender con una historia muy actual, deliciosa, sencilla y cotidiana… como una croqueta, en la que invita a lanzarse a la vida y buscar la felicidad a grandes bocados.
Croquetas y wasaps
¿Te has preguntado alguna vez qué quedará de ti cuando ya no estés? Cuando murió, el padre de Unai dejó una consulta vacía con su nombre en la puerta, dos niños que ya no serían futbolistas y un misterio por resolver. Cuando murió mi abuela, dejó un cuadro de unos pájaros a medio pintar, tres personas tristes y trece croquetas congeladas.