La familia Oso se cambia de casa, pero Oso Mediano protesta todo el rato, no quiere mudarse porque echará de menos a sus amigos. Su hermana Osa Mayor intenta convencerle de que en el valle encontrará otras amistades, pero él sigue quejándose. Poco a poco, irá descubriendo todas las cosas buenas que les ofrece su recién estrenado hogar: frutas, miel, agua fresca y nuevos compañeros, y aprenderá, por fin, a valorarlas.
La familia Oso se cambia de casa, pero Oso Mediano protesta todo el rato, no quiere mudarse porque echará de menos a sus amigos. Su hermana Osa Mayor intenta convencerle de que en el valle encontrará otras amistades, pero él sigue quejándose. Poco a poco, irá descubriendo todas las cosas buenas que les ofrece su recién estrenado hogar: frutas, miel, agua fresca y nuevos compañeros, y aprenderá, por fin, a valorarlas.
No, no y no
Oso Mediano caminaba el último. Delante de él marchaba su hermana mayor, Hermana Osa. En primer lugar, Madre Osa con una maleta y Padre Oso con Oso Pequeño en los brazos. La familia Oso abandonaba las montañas nevadas, donde habían vivido. -¿Por qué nos tenemos que ir? –protestó Oso Mediano. Padre Oso le dijo: -Ya te lo hemos explicado. Nos mudamos de casa. Vamos a un valle más cálido, donde hay más comida.