El convulso comienzo del siglo XX trajo consigo la eclosión de obras de rara belleza, como El gran Meaulnes (cuyo centenario conmemoramos en 2013), un texto que -en pleno furor vanguardista- proponía una vuelta al romanticismo que había surgido de las ansias de infinitud y de rebeldía vital de los europeos del siglo anterior. La novela de Alain-Fournier retrata -con un lenguaje de tono poético- el impulso y la fortaleza casi mesiánicos que mueven a quien se rige por unos ideales que no parecen hechos a la medida de la realidad del mundo, pero que guiarán la razón y el corazón del joven Agustin Meaulnes en la búsqueda del verdadero amor, que no siempre está a nuestro alcance. Imprescindible.
El convulso comienzo del siglo XX trajo consigo la eclosión de obras de rara belleza, como El gran Meaulnes (cuyo centenario conmemoramos en 2013), un texto que -en pleno furor vanguardista- proponía una vuelta al romanticismo que había surgido de las ansias de infinitud y de rebeldía vital de los europeos del siglo anterior. La novela de Alain-Fournier retrata -con un lenguaje de tono poético- el impulso y la fortaleza casi mesiánicos que mueven a quien se rige por unos ideales que no parecen hechos a la medida de la realidad del mundo,... Seguir leyendo
El gran Meaulnes
Llegó a nuestra casa un domingo de noviembre de 189... Aún sigo diciendo «nuestra casa» aunque ya no es nuestra. Abandonamos la región hace cerca de quince años y seguramente no volveremos nunca más. Vivíamos en el edificio de la Escuela Superior de Sainte-Agathe. Mi padre, a quien yo llamaba señor Seurel, igual que los demás alumnos, dirigía a la vez el Curso Superior, en el que se preparaba el título de maestro, y el Curso Medio. Mi madre daba clase a los pequeños.
Llegó a nuestra casa un domingo de noviembre de 189... Aún sigo diciendo «nuestra casa» aunque ya no es nuestra. Abandonamos la región hace cerca de quince años y seguramente ya no volveremos nunca más. Vivíamos en el edificio de la Escuela Superior de Sainte-Agathe. - See more at: https://www.canallector.com/1762/El_gran_Meaulnes#sthash.c0rdrEbm.dpuf
Llegó a nuestra casa un domingo de noviembre de 189... Aún sigo diciendo «nuestra casa» aunque ya no es nuestra. Abandonamos la región hace cerca de quince años y seguramente ya no volveremos nunca más. Vivíamos en el edificio de la Escuela Superior de Sainte-Agathe. - See more at: https://www.canallector.com/1762/El_gran_Meaulnes#sthash.c0rdrEbm.dpuf
Llegó a nuestra casa un domingo de noviembre de 189... Aún sigo diciendo «nuestra casa» aunque ya no es nuestra. Abandonamos la región hace cerca de quince años y seguramente ya no volveremos nunca más. Vivíamos en el edificio de la Escuela Superior de Sainte-Agathe. - See more at: https://www.canallector.com/1762/El_gran_Meaulnes#sthash.c0rdrEbm.dpuf
Llegó a nuestra casa un domingo de noviembre de 189... Aún sigo diciendo «nuestra casa» aunque ya no es nuestra. Abandonamos la región hace cerca de quince años y seguramente ya no volveremos nunca más. Vivíamos en el edificio de la Escuela Superior de Sainte-Agathe. - See more at: https://www.canallector.com/1762/El_gran_Meaulnes#sthash.c0rdrEbm.dpuf
Llegó a nuestra casa un domingo de noviembre de 189... Aún sigo diciendo «nuestra casa» aunque ya no es nuestra. Abandonamos la región hace cerca de quince años y seguramente ya no volveremos nunca más. Vivíamos en el edificio de la Escuela Superior de Sainte-Agathe. - See more at: https://www.canallector.com/1762/El_gran_Meaulnes#sthash.c0rdrEbm.dpuf