Prohibido leer a Lewis Carroll
Nueva York, inicios de la década de los treinta. Una acomodada familia se dispone a contratar a una institutriz parisina con el objeto de que -mediante disciplina y buenas formas- logre 'apaciguar' el carácter soñador y letraherido de la pequeña de la casa, quien lleva por nombre el mismo que el de su personaje de ficción favorito, Alicia. Pronto, la delicada preceptora Eugéne tendrá oportunidad de ponerse al día respecto de las peculiaridades y rarezas de la existencia con la familia Welrush, empezando por la más descacharrante de todas: la prohibición tajante de hablar de las obras infantiles de Lewis Carroll en presencia de su pupila. Pero la realidad es tozuda, y Alicia más, así que es posible que -con un poco de suerte- nuestra niña protagonista acabe conociendo a la mismísima inspiración de Carroll, Alice Liddell, convertida ya en una anciana más simpática que venerable, como cabría esperar de la jovencita que hurgaba en madrigueras y en el interior de los espejos. Para saber cómo se produjo tan ansiado encuentro, habrá que aventurarse en las páginas de esta apreciable novela, que incluye ilustraciones con un delicado toque retro y fue galardonada con el Premio Lazarillo en 2012, el Premio Nacional de Literatura Infantil y Juvenil en 2014 e incluida en la prestigiosa selección White Ravens 2014. Humor, absurdo y metaliteratura en un texto absolutamente delicioso.
Nueva York, inicios de la década de los treinta. Una acomodada familia se dispone a contratar a una institutriz parisina con el objeto de que -mediante disciplina y buenas formas- logre 'apaciguar' el carácter soñador y letraherido de la pequeña de la casa, quien lleva por nombre el mismo que el de su personaje de ficción favorito, Alicia. Pronto, la delicada preceptora Eugéne tendrá oportunidad de ponerse al día respecto de las peculiaridades y rarezas de la existencia con la familia... Seguir leyendo
Prohibido leer a Lewis Carroll
Parpadeos.
Todo el mundo sabe lo que es parpadear: abrir y cerrar repetidamente los párpados. Cuando decimos que todo el mundo lo sabe, no es solo una forma de hablar, no es como decir 'todos mis amigos' o 'toda mi ciudad'. Todo el mundo es todo el mundo, porque todas las personas de todo el planeta Tierra parpadean. Y todas lo hacen igual. Siempre ha sido así.
Durante la historia de la humanidad han cambiado muchas cosas: la forma de vestir, la forma de divertirse, la forma de construir y la forma de destruir. Pero la forma de parpadear, no.
Parpadead un par de veces. ¿Ya? Pues igual que vosotros lo habéis hecho se parpadeaba hace mil años, o hace cien.
Y lo que más nos interesa para esta historia, hoy en día nosotros parpadeamos igual que se parpadeaba en el año 1932.
Título: |
Prohibido leer a Lewis Carroll |
Autor: |
Diego Arboleda |
Ilustrador: |
Raúl Sagospe |
Editorial: |
Anaya |
|
Madrid, 2013 España |
Págs: |
208 |
Soporte: |
Papel |
ISBN: |
978-84-678-4012-4 |
Seleccionado por: |
Fundación Germán Sánchez Ruipérez |
Edad recomendada:
De 9 a 11 años |
Este libro trata de:
Personajes fantásticos, Literatura, Personajes de ficción, Aficiones, Nonsense, Relación niño-adulto, Sátiras, Institutrices, Honradez, Relaciones familiares, Lectura, Libros, Vida social y costumbres, Ruptura de estereotipos |
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