Esta simpática revisión de la archiconocida historia de los amantes de Verona, solo tiene en común con su matriz el romance de una joven pareja, Julieta y Romeo, pues, a partir de ahí, todo es diferente ¡e infinitamente mejor! Para empezar, Julieta, además de alimentar su mente, cultiva una dulce afición que tiene fascinados y felices a los ratones que moran en los escondrijos de su cocina: prepara tartas ricas, muy ricas. Y, ya se sabe, el gusto desacomplejado por la comida es metáfora habitual del corazón enamorado. Pobre Julieta, que no sabe cómo comunicar el amor que siente por su profesor. Por suerte, sus glotones vecinos, agradecidos, vendrán en su ayuda para que conserve la ilusión y logre su propósito. Ya lo dice la autora de este libro, "¿Qué es la esperanza? Oler de repente a tarta". Delicioso texto.
Esta simpática revisión de la archiconocida historia de los amantes de Verona, solo tiene en común con su matriz el romance de una joven pareja, Julieta y Romeo, pues, a partir de ahí, todo es diferente ¡e infinitamente mejor! Para empezar, Julieta, además de alimentar su mente, cultiva una dulce afición que tiene fascinados y felices a los ratones que moran en los escondrijos de su cocina: prepara tartas ricas, muy ricas. Y, ya se sabe, el gusto desacomplejado por la comida es metáfora habitual del corazón enamorado. Pobre... Seguir leyendo
Julieta, Romeo y los ratones
Los primeros ratones que fueron a casa de Julieta llegaron atraídos por el dulce y tibio olor a tarta que salía de aquella vieja pero señorial mansión. Esta casa era el único bien que le dejaron a Julieta sus padres al morir. Aquellos ratones pioneros estaban muy hambrientos, y habían pasado muchas calamidades en su corta vida. Así que el olorcillo a galleta, los restos de queso y las migajas de pan tierno les parecieron manjares exquisitos. Llenos de esperanza, se instalaron en un agujero de la amplia cocina de Julieta...