La vanidad y la idiotez humanas llevabas al absurdo: dos adinerados prohombres, con apellidos grandilocuentes y tan largos como su jactancia, se enzarzan en una alocada carrera por edificar la mansión más alta y más lujosa en el menor plazo de tiempo... hasta que la gravedad y la sensatez imponen su ley y ajustan cuentas con ambos. Alegoría de la opulencia irracional y, en cierto modo, de las derivaciones perniciosas del poder del dinero sin conciencia crítica, Los rascacielos es uno de los álbumes más interesantes del binomio formado por el escritor Germano Zullo y la ilustradora Albertine, una colaboración que ha producido álbumes deliciosos -como el que nos ocupa-, todos recomendados en Canal Lector. Acertada visión de la modernidad -que recuerda al periodo de notable auge constructor de rascacielos en el Nueva York de los años treinta- servida en delicado envoltorio.
La vanidad y la idiotez humanas llevabas al absurdo: dos adinerados prohombres, con apellidos grandilocuentes y tan largos como su jactancia, se enzarzan en una alocada carrera por edificar la mansión más alta y más lujosa en el menor plazo de tiempo... hasta que la gravedad y la sensatez imponen su ley y ajustan cuentas con ambos. Alegoría de la opulencia irracional y, en cierto modo, de las derivaciones perniciosas del poder del dinero sin conciencia crítica, Los rascacielos es uno de los álbumes más interesantes del... Seguir leyendo
Los rascacielos
Casa de Agenor-Agobar Poirier des Chapelles.
Casa de Willigis Kittycly Junior.