Elías Tuerceárbol es capaz de arreglar cualquier objeto que esté estropeado: el ventilador, la aspiradora, la radio... Pero hay una cosa que no puede arregar: los sueños. Durante meses, hay una pesadilla que le persigue y no le permite tener dulces sueños. Una noche, se acerca a la ventana de su habitación el Sr. Luna, quien le dice que la fábrica de POLVO DE LUNA está averiada y sólo hay una persona que pueda arreglarla: él, Elías Tuerceárbol. ¿Será capaz de arreglar y parar la pesadilla que le persigue todas las noches?
Elías Tuerceárbol es capaz de arreglar cualquier objeto que esté estropeado: el ventilador, la aspiradora, la radio... Pero hay una cosa que no puede arregar: los sueños. Durante meses, hay una pesadilla que le persigue y no le permite tener dulces sueños. Una noche, se acerca a la ventana de su habitación el Sr. Luna, quien le dice que la fábrica de POLVO DE LUNA está averiada y sólo hay una persona que pueda arreglarla: él, Elías Tuerceárbol. ¿Será capaz de arreglar y parar la pesadilla... Seguir leyendo
Polvo de luna
Elías giró con cuidado la rueda del volumen de la radio, que se encendió con un chasquido.
"ELÍAS TUERCEÁRBOL", dijo su madre, apagando la radio con un ruidoso CLIK.
"Ya llegó tu hora de ir a la cama."
"Jolín, Mamá, la acabo de areglar".
"Y veo que también has arreglado el ventilador y la aspiradora, pero igualmente sigue siendo hora de irse a la cama".