Ya en la colección de retratos que incluyen las guardas podemos intuir que Ivy no es una niña corriente. Carismática, dicharachera y convencida de sus virtudes no comprende por qué algunas de las personas para las que ha trabajado como sirvienta la rechazan y salen huyendo. Sin embargo, la posibilidad de llevar a cabo una extraña misión encargada por la duquesa de Trinity, llevar el Reloj Diamantino a la fiesta de cumpleaños de Matilda Butterfield, una niña malcriada de la alta sociedad, puede otorgarle una pequeña fortuna y, de paso, cambiar su imagen irreverente. El relato está vestido con una gran colección de ilustraciones en blanco y negro, humorísticas a la par que siniestras, inspiradas en la literatura gótica y el steampunk, que contribuyen a moldear la sensación de extrañeza que provoca su lectura.
Ya en la colección de retratos que incluyen las guardas podemos intuir que Ivy no es una niña corriente. Carismática, dicharachera y convencida de sus virtudes no comprende por qué algunas de las personas para las que ha trabajado como sirvienta la rechazan y salen huyendo. Sin embargo, la posibilidad de llevar a cabo una extraña misión encargada por la duquesa de Trinity, llevar el Reloj Diamantino a la fiesta de cumpleaños de Matilda Butterfield, una niña malcriada de la alta sociedad, puede otorgarle una pequeña fortuna... Seguir leyendo
Ivy Pocket. El secreto del diamante
Encontré la nota sobre la cama de mi señora. Decía lo siguiente:
Querida señorita Pocket: Como verá, me he ido. No me siga. Insisto: ¡NO ME SIGA!
Me he embarcado en un viaje a Sudamérica por la sencilla razón de que está lo suficientemente alejado de París como para no tener que verla nunca más. La cuenta del hotel está saldada. En cuanto a sus honorarios, teniendo en cuenta los padecimientos que me ha causado, le he dejado la suma de una libra.